La dirección nacional del PP ha activado su agenda convocando en enero y febrero juntas directivas regionales y provinciales por toda España. Los 'populares' quieren tener a sus cargos movilizados para que defiendan la formación de un Gobierno de Mariano Rajoy, máxime cuando ni siquiera descartan la posibilidad de que se repitan las elecciones si no se llega a un acuerdo.

A la vuelta de las vacaciones de Navidad, la primera instrucción que dio Mariano Rajoy a su comité de dirección en una reunión celebrada el día 8 de enero fue mantener "la viveza" del partido y no permitir que estuviera paralizado, en un momento en el que el Ejecutivo está en funciones. Además, apuntó a que viene un periodo de negociación y pidió "serenidad" y "tranquilidad", según han indicado a Europa Press fuentes 'populares'.

Un mensaje similar transmitió este martes ante la Junta Directiva Nacional del PP --máximo órgano del partido entre congresos-- al asegurar que la formación "tiene que seguir trabajando" porque es "una etapa en la que hay que dar muchas batallas con el argumentario diario".

Por eso, Rajoy ha pedido a sus cargos que vayan celebrando juntas directivas regionales y provinciales con asistencia de miembros de la dirección nacional con el objetivo de "ir consolidando el mensaje", mantener la "presencia en la opinión pública" y "dar las batallas que procedan" que, en su opinión, serán "muchas", según dijo el martes ante la plana mayor de su partido.

Atendiendo a esa 'orden' de Rajoy, la secretaria general del PP y los cinco vicesecretarios han planificado una intensa agenda de actos por toda España en las próximas semanas. Así, María Dolores de Cospedal preside este jueves la Junta Directiva provincial del PP de Toledo; el responsable de Organización, Fernando Martínez-Maillo, acude a la Junta del PP de Baleares; y la vicesecretaria de Estudios y Programas, Andrea Levy, hará lo mismo en Palencia.

En esos actos, el PP busca apuntalar el mensaje de que es Rajoy el que debe gobernar con un pacto entre PP, PSOE y Ciudadanos, dejando claro que ésa es la "mejor opción" frente a las alternativas que pueda explorar el socialista Pedro Sánchez, que necesitaría el apoyo de partidos independentistas, según recalcan los 'populares'.

Eso sí, son conscientes de que el 'no' rotundo que ya ha expresado el líder del PSOE dificulta ese acuerdo. En este escenario, en las filas del PP ven factible la celebración de unas nuevas elecciones, razón por la que, según las mismas fuentes consultadas, el partido debe estar engrasado.

Tras el acuerdo que el PP ha sellado con PSOE y Ciudadanos para la Mesa del Congreso, los 'populares' admiten que quieren un acuerdo de Gobierno como el pacto "ejemplar" alcanzado en el órgano rector de la Cámara Baja.

"PP, PSOE y C's han llegado al primer gran acuerdo de la legislatura. Las tres grandes fuerzas constitucionalistas con representación parlamentaria han mostrado una actitud positiva, responsable y ejemplar", subraya el PP en su web 'En la buena dirección'.

Según el PP, los españoles "confían" en que todos los partidos "estén a la altura de la responsabilidad que el momento exige". A su entender, los nuevos tiempos exigen pactos desde la moderación y la centralidad, y "debe anteceder a la formación de un Gobierno de estabilidad, sustentado por un acuerdo amplio".