Curtida en mil batallas del socialismo asturiano, María Luisa Carcedo (San Martín del Rey Aurelio) es una de las voces elegidas por Pedro Sánchez para lidiar la negociación más difícil para formar gobierno en España desde la Transición. "Estoy animada pero consciente de que es una situación complicada en un escenario muy complejo. El PSOE estará a la altura de un partido responsable y no dirá "pasapalabra ''como Mariano Rajoy'', declaró anoche a LA NUEVA ESPAÑA esta médica, forjada en la cantera del guerrismo asturiano y protagonista de 40 años en los que el socialismo ha vivido etapas de victoria pero también travesías del desierto como la que ahora quiere dejar atrás.

Minuciosa, ordenada y rigurosa, María Luisa Carcedo es la secretaria general del grupo del PSOE en el Senado, al que llegó hace meses, antes de las elecciones generales, por designación de la Junta General del Principado. "Vamos a ver si somos capaces de llegar a acuerdos para ser la alternativa de un mal gobierno del PP, que ha llevado a la quiebra social y económica, disparando las desigualdades en este país", planteó María Luisa Carcedo, que junto a Adriana Lastra, conforma la cuota asturiana en la ejecutiva de Sánchez . La senadora es la secretaria federal de Bienestar Social, un área en la que las coincidencias con Podemos pueden reducir las líneas rojas que surjan en otros capítulos más peliagudos como, por ejemplo, el desafío soberanista catalán.

Su apariencia siempre frágil encuentra el contrapunto en la dureza de la que hizo gala allá por el año 2000 cuando primero llevó la voz cantante en el conflicto de la Caja de Ahorros de Asturias, que desató la más cruenta contienda en el socialismo regional, y luego fue una de las mayores defensoras de Javier Fernández en un congreso del que salió elegido como el pacificador de la FSA. En aquel tiempo María Luisa Carcedo ya atesoraba experiencia, no sólo en el ámbito orgánico sino también en el institucional, pues había sido consejera de Medio Ambiente en los gobiernos de Juan Luis Rodríguez-Vigil y de Antonio Trevín. Ante lo que se le avecina la próxima semana, le vendrán bien las "tablas" adquiridas en los procesos negociadores en Asturias, unos fructíferos y, alguno que otro estéril, la mayoría con Izquierda Unida.

Carcedo es una de las principales valedoras de Pedro Sánchez en la FSA, una de las pocas federaciones donde la victoria parcial fue para Eduardo Madina en vísperas del anterior congreso del PSOE. "Es una persona trabajadora, con valores, condiciones de líder, capacidad y formación", declaraba en una entrevista en LA NUEVA ESPAÑA cuando Pedro Sánchez daba sus primeros pasos como secretario general del PSOE. Las próximas semanas supondrán su reválida.