El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha rechazado este martes ante el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, celebrar un referéndum de independencia por ser "ilegal", pero le ha ofrecido diálogo y acuerdos concretos si se convierte en presidente del Gobierno central.

Lo ha dicho en rueda de prensa tras reunirse con él en la Generalitat, donde le ha ofrecido cumplir con "muchos" de los 23 puntos que el expresidente Artur Mas planteó al presidente Mariano Rajoy en su reunión de verano de 2014; la mayoría, sobre economía.

Sobre estos 23 puntos, ha hecho énfasis en la financiación autonómica, el cumplimiento de las inversiones previstas en el Estatut, el "reparto equitativo" de los objetivos de déficit, el Corredor del Mediterráneo y la financiación de la ley de dependencia: "Hay muchísimos elementos en los que nos podemos entender".

Reactivar la comisión bilateral

Sánchez rechaza la hoja de ruta soberanista del Govern, pero ofrece una alternativa: "Queremos una nueva hoja de ruta en las relaciones con la Generalitat basada en el diálogo, el entendimiento y la convivencia", y ha propuesto reactivar la comisión bilateral Generalitat-Estado.

Además de recuperar los 23 puntos de Mas y reactivar la comisión bilateral, Sánchez le ha hablado de su propuesta de reforma federal de la Constitución, que persigue modernizar las instituciones y "resolver los problemas de autogobierno que demanda Cataluña", entre otras cuestiones.

El líder del PSOE está dispuesto a "hablar de todo lo que esté dentro de la legalidad democrática y la Constitución", y quiere que las fuerzas catalanas --también las soberanistas-- participen de una reforma constitucional.

"Acordar primero y luego votar"

Dree que los independentistas quieren "primero votar para luego romper; pero lo importante es lo contrario: acordar primero y luego votar", por lo que ha tendido al mano a Puigdemont para dialogar sobre todo lo que entre en la legalidad con el fin de mejorar el encaje de Catalunya en España.

"Quiero que Cataluña participe en el proyecto de renovación que se vive en España" porque la mayoría de catalanes votó a formaciones progresistas dispuestas a mejorar el encaje autonómico en las elecciones generales, ha destacado.

Sánchez pondrá todo su ahínco en mejorar las relaciones Gobierno-Generalitat si es presidente y dará prioridad a Cataluña: "Por nosotros no va a quedar. Lo vamos a intentar todo siempre que esté dentro de la legalidad".

"En definitiva, las soluciones a muchos problemas de ahora entre Cataluña y el resto de España sólo tienen una fórmula posible: el diálogo y el acuerdo", algo que sólo puede abanderar un gobierno progresista encabezado por el PSOE, según él.

Derecho a decidir

Preguntado por si cree que el Govern y CDC están retrocediendo en sus aspiraciones independentistas para centrarse ahora en el 'derecho a decidir', Sánchez ha respondido que "Puigdemont ha defendido claramente el referéndum, su hoja de ruta", durante el encuentro.

Albert Rivera (C's)

Sobre la críticas de C's por si él se abría a negociar el referéndum con Puigdemont, Sánchez ha dicho que tanto él como el líder de C's, Albert Rivera, siempre han defendido el diálogo para dibujar soluciones y acabar con el bloqueo institucional: "Tanto él como yo siempre hemos dicho que el diálogo es fundamental".

"Rivera siempre ha criticado la falta de diálogo de Rajoy con las instituciones catalanas", una tendencia que Sánchez quiere revertir para abrir una nueva etapa de entendimiento, ha añadido.

Sobre si ha abordado con Puigdemont el apoyo de DL a su investidura, ha respondido que no, porque no era su intención: "He venido a abrir una etapa de deshielo entre la Generalitat y el Gobierno, y es cuando se abre una etapa de deshielo cuando afloran las soluciones".

El primero de muchos encuentros

Espera que la reunión de este martes sea "la primera de muchas" si acaba siendo presidente, porque las relaciones con Puigdemont van a ser fundamentales para abordar la mejora de la financiación de la Generalitat y del encaje de Cataluña en España.

Ha agradecido el buen tono del encuentro y la predisposición al diálogo de Puigdemont, en una reunión que abre una etapa de diálogo, que sólo se consolidará "de la mano de un gobierno del cambio" que acabe con cuatro años de liderazgo del PP en que se han bloqueado las relaciones, dice.

"Estoy convencido de que, dentro de la Constitución, hay mucho camino por recorrer para que Cataluña se sienta a gusto, como quiere y merece", aunque las soluciones no serán fáciles, inmediatas ni sencillas, ha resumido.