El presidente de la gestora del PSOE, Javier Fernández, entró ayer de lleno en la confrontación verbal con Podemos al reprochar a su líder, Pablo Iglesias, que esté "endureciendo" hasta "extremos brutales" la vida política en España por pretender arrojar "basura" sobre los dirigentes socialistas . Para Fernández, Iglesias es un "fariseo", el "Caifás de la política". Desde la formación morada, el secretario de Organización, Pablo Echenique, achacó las manifestaciones del ahora máximo dirigente del PSOE a su pretensión de desviar la atención del "acto vergonzoso" que están a punto de cometer los socialistas con su previsible abstención en la investidura de Mariano Rajoy.

En un entrevista matutina en Telecinco, Fernández relató cómo Podemos cerró el paso al PSOE en Gijón y "prefirió que gobernara la derecha" de Álvarez -Cascos. Lo hizo, añadió, "de la peor manera posible", porque para justificarlo "enfangó la reputación del candidato de los socialistas". "Lo que más me molesta de Podemos", explicó, es que algunos responsables la formación morada "salen todas las mañanas con una bolsa de basura en la mano, buscando la vida de un socialista para depositarla como si fuera un vertedero. Y con eso yo no puedo estar de acuerdo".

La llegada del presidente del Principado al epicentro de la política nacional, tras la crisis abierta en el seno del PSOE, ha propiciado que los máximos dirigentes de Podemos hagan suyo el discurso que hasta ahora sostenían en el ámbito regional. Pablo Echenique reprochaba ayer a Javier Fernández que gobierne con unos presupuestos aprobados por el PP, que intentara que los populares siguieran al frente del Ayuntamiento de Oviedo y que sea "muy cercano" a personas implicadas en el "caso Musel". Sus manifestaciones sobre Pablo Iglesias tratan de "desviar la atención" para que "el oprobio y la vergüenza" del "acto vergonzoso" que están "a punto de cometer" con recaiga sobre el PSOE. El secretario de Organización de Podemos considera que"se va a dar algo inédito" porque "por primera vez el PSOE va a investir a un presidente del PP".

Respecto al debate interno, Echenique considera que Iglesias y Errejón tienen su relación similar a la de Mulder y Scully, los protagonistas de Expediente X: "Había tensión sexual pero luego funcionaban muy bien".