Francisco Nicolás Gómez, el 'pequeño Nicolás', intentó estafar a Mercadona pidiendo dinero por sus servicios para frenar una supuesta maniobra de su rival Carrefour, que, según su relato, amenazaba con difundir el bulo de que buena parte de sus productos eran tóxicos o cancerígenos.

Según una información que publica este miércoles El Mundo, el 'pequeño Nicolás' llegó a implicar al Gobierno al presentar a Mercadona un falso dossier en el que aparecía el membrete fotocopiado del Ejecutivo y el nombre de Soraya Sáenz de Santamaría escrito como 'Soraya Saez de Santamaria'.

El chapucero informe del 'pequeño Nicolás' aseguraba que el Gobierno tenía constancia de plan de Carrefour por el sistema de escuchas telefónicas Sitel del Ministerio del Interior. El texto, repleto de faltas de ortografía y sintaxis, alertaba a la empresa de la familia Roig de que el "presidente de Carrefour" había sido "interceptado" preparando la maniobra de desprestigio contra la marca española.

Según el dossier inventado por el joven, Carrefour intentaría "infiltrar a personal español para, desde dentro, crear alarma social con productos intoxicados o recintos desprotegidos en los que, a través de la manipulación, consigan el objetivo principal".

En el texto, el 'pequeño Nicolás' desplegaba su imaginación aludiendo a productos concretos e incluso refiriéndose a irregularidades laborales inventadas que podrían afectar a la imagen de la cadena. Tras este relato, el estafador se proponía "localizar de una manera completa y eficaz a todas las personas que vayan en contra" de la empresa.

La Policía ya considera a Francisco Nicolás Gómez responsable de una organización criminal en la que existía una "pluralidad de personas", un "carácter estable" y una "jerarquía" en la que él aparece como responsable máximo.