¿Debe el PSOE elegir secretario general en exclusiva o también un perfil de dirigente que sea potencial candidato electoral? Esta es la pregunta que un sector de los socialistas se plantea estos días. La incertidumbre económica mundial y el riesgo de que unas elecciones anticipadas diesen un resultado imprevisto (basta mirar a Estados Unidos) hacen presuponer que sean menores las opciones de Mariano Rajoy para invocar las urnas en caso de una gobernabilidad difícil, a juicio de algunos dirigentes socialistas. En ese escenario, se abre la posibilidad de que el próximo congreso federal elija un secretario general de transición, para ordenar el partido y cerrar heridas, hasta que se elija al futuro candidato. Medios socialistas admiten que una de las opciones, en ese caso, sería el propio Javier Fernández. Ayer mismo, Eduardo Madina insistió en que su "referente intelectual y político" es el presidente asturiano, porque "los socialistas del norte" tienen "códigos un poco intangibles que les llevan a entenderse mejor". Precisamente del norte provienen los otros nombres que suenan como secretarios generales sin optar a candidatos: Ramón Jáuregui y Patxi López.