Los Reyes Magos de Oriente han vuelto a cumplir con su promesa de llevar una vez al año la ilusión a todos los rincones de España y, con vistosas cabalgatas rodeadas de medidas de seguridad, han repartido cariño y toneladas de caramelos a multitud de niños y mayores.

Melchor, Gaspar y Baltasar han llegado a ciudades y pueblos en carrozas pero, gracias a su magia, también en barco e incluso en helicóptero para después desfilar repartiendo ilusión.

Más de 100.000 efectivos -policías nacionales, locales, guardias civiles y seguridad privada- han velado por que las cabalgatas discurrieran sin incidentes, en especial tras el atentado de Berlín contra un mercado navideño.

Familias enteras han disfrutado recogiendo los caramelos -incluidos sin gluten y sin azúcar- arrojados desde las carrozas y al ver a los Magos se han emocionado, especialmente los más pequeños, ajenos al blindaje de seguridad y a polémicas como la presencia de animales o el reparto de farolillos independentistas como en la cabalgata de Vic (Barcelona).

En Madrid, doce carrozas han tenido como eje principal animar a no perder nunca la curiosidad, y Melchor, Gaspar y Baltasar han acudido vestidos con su vestimenta más elegante y clásica, después de las críticas del pasado año por exhibir trajes no tan tradicionales que se llegaron a comparar en twitter con "cortinas de baño".

Una novedad de la cabalgata madrileña es que ha contado con intérpretes para narrar en lenguaje de signos el relato de varias carrozas para hacerlo más accesible.

En Barcelona, cientos de miles de personas han dado la bienvenida a los Reyes, que han llegado al puerto de la ciudad condal a bordo del velero "Santa Eulalia". Para la cabalgata se han estrenado nuevas carrozas ambientadas en la Alhambra, los bosques japoneses y la sabana africana, que han sido las estrellas de un recorrido de cinco kilómetros por la calles de la ciudad.

Los niños de Valencia han contemplado la cabalgata vigilada por más de 250 agentes, y miles de figurantes han repartido caramelos dentro de un séquito real formado por 30 carrozas.

En Alcoy (Alicante), unos 400 pajes han repartido juguetes junto a sus Majestades en la cabalgata considerada como la más antigua de España, pues se celebra desde 1885.

Los Magos han aterrizado en Logroño en uno de los cinco modernos helicópteros "Caimán" que posee el Ejército de Tierra. El aparato se ha posado en el estadio de Las Gaunas después de realizar unas maniobras ante más de 16.000 espectadores, principalmente niños, ubicados en las gradas.

También han acudido los Reyes Magos en helicóptero a varias localidades andaluzas, entre ellas Puerto Real y San Fernando, en Cádiz; y al Puerto de Santa María en velero.

En Sevilla se ha conmemorado el primer centenario de su cabalgata, en la que Baltasar lo encarna el alcalde; y en Málaga, el Consistorio ha mantenido fuerte medidas de seguridad para evitar accidentes como el atropello que costó la vida a un niño de 6 años en 2013.

Sus Majestades han desembarcado en ciudades murcianas como Mazarrón o Cartagena, mientras que han aterrizado en helicóptero en Lorca; en Cartagena se han lanzado miles de caramelos y peluches y en Murcia la danza ha protagonizado un desfile con carrozas, grupos de ballet, comparsas y bandas de música.

Once carrozas, tres pasacalles y doscientas personas participan en la Cabalgata de Santander, donde los Reyes saludan los niños desde el balcón de la ciudad tras hacer una ofrenda de oro, incienso y mirra en un Belén viviente.

Los Magos han ido en avión al municipio de Camargo, después a Laredo en tren y a San Vicente de la Barquera en pesquero.

En Zaragoza han desfilado en una cabalgata interestelar rodeada de planetas y estrellas; mientras que en Huesca han protagonizado una cabalgata bajo el lema "Constructores de Sueños", ensalzando la capacidad del juego como su fuente de inspiración.

La cabalgata más peculiar en Castilla-La Mancha ha vuelto a ser la de Alarilla (Guadalajara), a donde los Reyes llegan en ala delta y sus pajes en parapente, portando bengalas.

Precedida de fuegos artificiales, la cabalgata de Pamplona ha recorrido el centro de la ciudad después de que los tres Reyes hayan llegado en sus dromedarias, de nombre "Pasolargo", "Rubia" y "Copito".

Los Magos se han acercado a Castilla y León por tierra, mar y aire, protagonizando multitudinarias cabalgatas en las que no han faltado animales como en Palencia (ocas amaestradas y ovejas), Zamora (camellos) y Soria (caballos).

A Vitoria, los Reyes han ido cargados de regalos y buenos deseos y más de 400 personas han participado en la cabalgata. Bien entrada la noche, en el momento más esperado, se realiza el reparto casa por casa de los regalos que sus Majestades han traído.

Los Reyes también han llegado en tren a Santiago de Compostela para participar en la tradicional cabalgata por las calles de la ciudad antes de entregar los regalos a los niños esta noche.

En Extremadura, Sus Majestades han sido seguidos por la atenta mirada de los niños de Badajoz, Mérida, Cáceres, Plasencia o Zafra, entre otras localidades, donde las cabalgatas convierten esta noche en la más mágica del año.

En Melilla los Reyes se han trasladado a caballo, en vez de hacerlo en barco como en años anteriores, ante el numeroso público que les esperaba para ver la cabalgata.

Los Magos han arribado por mar al muelle viejo del puerto de Palma de Mallorca a bordo del "Rafael Verdera" y, como novedad, este año han saludado desde el balcón del Casal Solleric, frente a la plaza Joan Carles I.

Por su parte, más de 1.600 figurantes y una treintena de carrozas han intervenido en las cabalgatas de Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife, que han vuelto a despertar la ilusión y la esperanza de miles de niños.