La tradicional recepción de los Reyes al cuerpo diplomático -en la imagen- estuvo ayer marcada por la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, aunque entre el casi un centenar de embajadores presentes no estaba el de EE UU, ya que el puesto está vacante desde que el magnate accedió a la presidencia, el día 20. Felipe VI expresó su deseo de seguir trabajando con EE UU con "el mismo nivel de excelencia" que hasta ahora.