El matrimonio Pujol-Ferrusola guardaba en el salón de su casa en Barcelona, registrada el 26 de abril, una copia del testamento del abuelo Florenci, cuya herencia ha sido esgrimida por el expresidente catalán para justificar el origen de su fortuna en Andorra, justificación que el juez del caso no se cree.

En el acta de entrada y registro en el domicilio del matrimonio, en la Ronda General Mitre, a la que ha tenido acceso Efe, consta una relación manuscrita de todos los documentos que fueron intervenidos por orden del juzgado de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional al ser considerado de interés para la causa.

Estos documentos y soportes informáticos, intervenidos en la llamada operación Hades, fueron guardados en dos cajas y puestos a disposición de la UDEF para su análisis y elaboración de "sucesivos informes policiales".

Entre todos ellos destaca el documento 001 encontrado en el "Salón-Sala de Estar" y que ha sido identificado en el acta como "Testamento otorgado por el senyor Florencio Pujol Brugat 17 marzo 1967 nº807 Notario Ángel Martínez Sarrión".

También fue hallado el testamento de la madre del expresidente catalán, María Soley i Mas, con fecha de 26 mayo 1981 y suscrito por el notario Luis Jon i Mirabent.

Además figura un documento que, bajo el epígrafe "testamento de Jordi Pujol Ferrusola", el mayor de los 7 hijos del matrimonio recoge el original del testamento de María Soley y consta como notario Lluis Roca-Sastre.

En el salón los agentes encontraron también una escritura de Banca Catalana fechada el 21 de abril de 1965 y suscrita por el notario Ramón María Roca Sastre. En 1984, Pujol se vio salpicado por el caso Banca Catalana, al ser incluido en una querella, si bien no llegó a ser procesado.

En la estancia que el expresidente tiene como despacho se encontró otro documento que en el acta aparece reflejado como "carta de papa (avi Florenci)", y otro identificado como "libreta mamá con anotaciones manuscritas de avi Florenci".

De ese mismo despacho los agentes se llevaron también un Ipad, una CPU, cuatro pendrives, recortes de prensa, una carta de Jordi Pujol a su hijo Josep y un borrador de la intervención del expresidente catalán en el Parlament, el 26 de septiembre de 2014, sobre el origen de su fortuna.

Pujol ha declarado ante el juez De la Mata que su padre dejó 140 millones de las antiguas pesetas a su mujer Marta Ferrusola y a sus nietos, y no a él, con el objeto de "proteger" a la familia en un momento político delicado, ya que el mismo año en que falleció, 1980, él accedió a la Presidencia de la Generalitat. Sin embargo, el juez del caso, José de la Mata, no se ha creído esta versión.

Además del domicilio de Barcelona, la Policía registró otra casa del matrimonio en Queralbs (Girona) que dio "resultado negativo", así como el despacho del expresidente catalán en la calle Calabria y el de su primogénito en la calle Ganduxer, ambos en Barcelona y de donde los agentes también se llevaron documentos y material informático.

Cuando se produjo el registro en otra instancia, que figura como "habitación caja fuerte", la secretaria del juzgado hace constar que por los hijos que presenciaron esta diligencia, entre ellos Pere Pujol, "se hacen fotografías de los documentos que consideraron de valor sentimental".