Ascensión Mendieta ha enterrado en el cementerio civil de la Almudena (Madrid) a su padre Timoteo, un sindicalista represaliado del franquismo asesinado en 1939 cuyos restos fueron exhumados en mayo gracias a la "querella argentina", la causa que investiga los crímenes del franquismo en ese país latinoamericano.

Mendieta, de 91 años, ha podido este domingo dar sepultura a su padre, hasta ahora enterrado en una fosa común del cementerio de Guadalajara y cuyos restos fueron hallados en la primera exhumación que se realiza en España solicitada por la jueza argentina María Romilda Servini de Cubría por el principio de justicia universal.

A su paso por el cementerio civil de la Almudena, tras el féretro, Mendieta ha sido aplaudida por múltiples personas que la felicitaban, le daban las gracias y le llamaban "valiente" entre claveles rojos y banderas tricolor.

Los restos de este sindicalista, asesinado el 15 de noviembre de 1936, fueron identificados el pasado 9 de junio; su cuerpo fue enterrado un día después de su muerte en una fosa común del cementerio de Guadalajara y han sido necesarias dos exhumaciones para encontrarlo.

Ascensión Mendieta forma parte del grupo de familiares de víctimas de crímenes cometidos durante la guerra civil y la dictadura de Francisco Franco (1939-9175) que en 2010 interpuso una demanda ante el Tribunal Oral Federal de Argentina, creado especialmente para la defensa de los Derechos Humanos y ha sido la primera en hallar los restos de sus familiares.

A los 88 años voló a Argentina para pedir ayuda a la jueza María Romilda Servini.

El empeño de esta mujer nonagenaria permitirá a otras 27 familias identificar a sus parientes, como resultado de las dos exhumaciones llevadas a cabo en su búsqueda, según aseguró en un comunicado la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica.