La reunión de mediación entre la dirección y el comité de Eulen ha acabado esta noche sin acuerdo, por lo que los vigilantes de seguridad del Aeropuerto de Barcelona-El Prat mantienen las huelgas previstas para los próximos días, la primera de ellas el domingo, día 6, de forma parcial.

En la mediación de la Generalitat, en la que por primera vez ha participado Aena, el gestor aeroportuario, la empresa ha presentado una contraoferta a los trabajadores, pero éstos la han rechazado al considerarla insuficiente.

Tras la reunión en el departamento de Trabajo, que ha durado cerca de nueve horas, el abogado del comité de huelga, Leopoldo García, ha explicado que la propuesta de Eulen no da respuesta "a ninguno de los puntos" más destacados de "la tabla reivindicativa elaborada por la asamblea de trabajadores", por lo que no pueden apoyarla.

El abogado, además, ha destacado que una de las condiciones que los trabajadores pusieron para desconvocar la huelga era que la empresa retirase la demanda por huelga ilegal, algo que no ha hecho, por lo que se celebrará un juicio por este asunto el 9 de agosto en el juzgado de lo social número 9 de Barcelona.

García ha asegurado que Eulen se ha limitado a comprometerse a "estudiar y valorar" las propuestas de los trabajadores, sobre todo aquellas referentes a "la incongruencia entre la carga de trabajo y la dimensión de la plantilla".

"No se puede pretender que en medio de una huelga se hagan propuestas tan vagas. La plataforma de los trabajadores es conocida por la empresa desde hace más de diez días. Es una huelga que ha observado escrupulosamente los plazos de preaviso", ha afirmado.

Por ello, el abogado ha declarado que la propuesta de Eulen "no va a desconvocar definitivamente la huelga, pero ni tan siquiera logrará suspender parte del calendario previsto".

García se ha mostrado contrariado, pues ha asegurado que "aunque el comité de huelga no tenía previsto llegar a un acuerdo, ni siquiera a un preacuerdo hoy", por lo menos tenía la intención de "avanzar hacia un marco de negociación que diera posibilidades en última instancia para atajar las condiciones que llevaron a la huelga", cosa que no ha pasado.

El abogado del comité ha confirmado que la huelga seguirá y que por el momento no está previsto otra reunión como la de hoy, en la que han participado Eulen y los trabajadores, así como Aena, como observador, y la Generalitat como mediadora.

Los próximos paros parciales están convocados para los días 6, 7, 11 y 13 de agosto, mientras que a partir del día 14 la plantilla intensificará su protesta y llevará a cabo una huelga indefinida de 24 horas.

Este viernes, primer día de paros, el aeropuerto de El Prat ha vivido una jornada de caos, especialmente por la mañana, cuando los pasajeros han tenido que hacer colas de más de una hora y media para pasar los controles de seguridad.

Comprensión con los trabajadores

"Nosotras estamos en la cola, mientras ellos facturan las maletas. Es que es un viaje caro, a Brasil", ha justificado Bea Montovio, que se ha mostrado preocupada por la situación, pero entendía que los trabajadores de Eulen protestasen para reclamar mejoras de las condiciones laborales.

Otros viajeros, muchos de ellos extranjeros, han llegado a El Prat conscientes de lo que se iban a encontrar y han encarado la espera con resignación.

"Tendrán sus motivos para hacer huelga, así que paciencia", ha comentado Melisa, que ha apurado el tiempo y ha llegado al aeropuerto con sólo dos horas de antelación, el tiempo mínimo en una jornada normal.

Algunos usuarios, como el estadounidense Christopher Grant, que lleva quince años viviendo en Cataluña, han lamentado el perjuicio que la huelga está causando a los pasajeros y también la imagen negativa que puede transmitir Barcelona a causa de estos problemas.

"Es una situación difícil, pero entiendo las quejas de los trabajadores. Son cosas que tienen las externalizaciones", ha afirmado Grant.