La aerolínea Vueling ha afirmado este mediodía en Palma que está "investigando" el hecho causado en un vuelo de conexión entre Barcelona y Menorca y que ha generado gran revuelo. Se trata de la expulsión de dos pasajeras el pasado sábado de un avión por, según denunciaron las expulsadas, hablar catalán a una de las auxiliares de vuelo. Sin embargo, varios testigos de los sucedido han contradicho esea versión asegurando que las dos señoras despreciaron a la azafata, que "era asturiana", por no hablar español y que fueron obligadas a abandonar el avión por su comportamiento.

"Estamos investigándolo, tanto por el lado de nuestros empleados como por el de nuestra clienta. Volamos a cuarenta países y somos muy respetuosos con estos temas. Claramente garantizamos el derecho de nuestros pasajeros a hablar catalán", ha subrayado Manuel Ambriz, director de red de la aerolínea.

El ejecutivo no ha confirmado ni desmentido el episodio. "Queremos tener la película completa. Vamos a manejar este asunto por los canales adecuados", ha insistido.

Ambriz ha recordado que "la norma obliga" a su personal a operar "en inglés y en castellano", pero ha asegurado que "la mayoría" de sus trabajadores que vuelan entre Cataluña y Baleares "entienden el catalán".

Según una de las pasajeras expulsadas, una auxiliar de vuelo le reprochó que se dirigiera a ella en catalán, preguntándole si no hablaba castellano. Según esta misma versión de los hechos, reproducida el pasado sábado por el portal Vilaweb.cat, otra pasajera afeó a la trabajadora su actitud. Instantes después el piloto las llamó a la cabina y les comunicó que debían abandonar el avión.