Agentes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil de Ceuta han rescatado durante la madrugada de este domingo tres cadáveres en el entorno de la playa de Santa Catalina, en la costa de la bahía norte de la ciudad autónoma, tras la llegada de una embarcación semirrígida de la fueron rescatados 21 inmigrantes subsaharianos, 19 hombres y dos mujeres, una de ellas embarazada.

Según ha informado la Delegación del Gobierno, la lancha, de nueve metros de eslora y con un motor de 300 caballos de potencia, fue divisada por el Centro Operativo de Servicios (COS) del Instituto Armado "entrando a gran velocidad en dirección a la costa norte de Ceuta".

Inmediatamente se desplazaron hasta el lugar tanto embarcaciones del Servicio Marítimo de la Guardia Civil como un equipo del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Comandancia que, al llegar al lugar, atendieron a los inmigrantes y localizaron, media hora más tarde, los cuerpos sin vida de tres varones en el agua.

Una vez activado el protocolo de emergencia sanitaria, todos los indocumentados fueron atendidos por la Cruz Roja como paso previo a su entrada en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de la ciudad.

La embarcación estaba pilotada por dos personas de origen magrebí que huyeron y están siendo buscados por la Guardia Civil.

El testimonio de los supervivientes ha permitido determinar que los dos pilotos que llevaban la embarcación les obligaron a saltar al agua cuando estaba cerca de la orilla.

Según han informado a Efe fuentes policiales, los inmigrantes subsaharianos rescatados con vida han declarado que los patrones de la embarcación les dijeron que tenían que abandonar la misma cuando todavía no habían alcanzado la costa.

Previamente, la embarcación había chocado contra unas rocas situadas cerca de la costa, lo que había provocado el nerviosismo de los pilotos.

Unos instantes después, los pilotos obligaron a los inmigrantes a saltar al mar, teniendo que actuar rápidamente los servicios de emergencia de la Guardia Civil y de Salvamento Marítimo.

En un primer momento se había barajado la hipótesis de que la embarcación hubiera volcado, pero el posterior testimonio de los supervivientes ha permitido determinar que chocó contra las rocas y posteriormente pudo llegar hasta la misma orilla, aunque únicamente con los dos pilotos en su interior.

Los dos pilotos, ambos de origen magrebí -previsiblemente marroquíes-, huyeron nada más embarrancar la embarcación en la misma playa de Santa Catalina, por lo que están siendo buscados por los agentes policiales.

Fuentes de la Policía han asegurado a Efe que es habitual que estas personas obliguen a los inmigrantes a saltar al mar e, incluso, son ellos mismos los que los arrojan al agua cuando se ven cercados por las fuerzas del orden.

Esta situación se provoca para lograr la huida, ya que la Guardia Civil se centra en el salvamento de los inmigrantes, muchos de los cuales no saben nadar.

El Servicio Marítimo de la Guardia Civil ha trasladado hasta el puerto deportivo de Ceuta la patera en la que viajaban los 24 inmigrantes subsaharianos.

Se trata de una embarcación semirrígida, con matrícula, dotada de un motor de 300 caballos, que está siendo analizada para conocer su procedencia.