El candidato a la Presidencia del PP Pablo Casado ha asegurado este sábado que no ha optado al liderazgo del partido "para conseguir un cargo ni para hacer lo mismo con los mismos", en velada referencia a Soraya Sáenz de Santamaría, que se ha mostrado hoy dispuesta a ser generosa "en la definición de equipos".

Al término de un acto de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Casado ha explicado que ya la semana pasada aclaró que no ha llegado hasta aquí "para hacer lo mismo con los mismos", y que "si alguien se ha presentado para seguir en el poder no es mi caso".

En declaraciones a la COPE, Sáenz de Santamaría ha mostrado este sábado su disposición a ser generosa "en la definición de equipos", y en concreto, la Secretaría General no tiene por qué ocuparla alguien de su candidatura, aunque todavía no se la ha ofrecido a Pablo Casado.

De lo que se trata, ha explicado Casado, es de refundar el centro derecha en España, y volver a ser el partido de los 11 millones de votos, pero no con un proyecto que ha estado al frente del gobierno durante 8 años y "ya se ha visto a dónde nos ha llevado: nos han echado con una moción de censura, y el problema catalán sigue ahí".

En caso de no resultar elegido presidente del PP, Casado trabajará "de forma leal y sin pedir nada a cambio", pero ha reiterado que no se ha presentado para conseguir un cargo, y "si alguien se ha presentado para seguir en el poder, no es mi caso".

No es de recibo, ha añadido, que se hable de cargos cuando los problemas son otros, Cataluña, la economía, las víctimas del terrorismo, ya que si el PP quiere volver a gobernar tiene que hacer "todo lo que no se ha hecho, aplicar el 155 de forma adecuada, bajar impuestos, acompañar a las víctimas", y ser "un partido ganador sin bisagras y sin depender de nadie.

Respecto a si unirá fuerzas con la candidata que ha quedado en tercera posición, María Dolores de Cospedal, ha indicado que con ella le unen "valores y una estructura de partido con la que se siente identificado".

En todo caso, Casado espera "contar con todo el mundo", ya que el resto de candidatos tiene su "máximo respeto" y comparte con ellos "una idea de España.