El líder del PP, Pablo Casado, ha decidido dar funciones en el Congreso y Senado a algunos afines a su rival en las primarias, Soraya Sáenz de Santamaría, y mantiene en las direcciones de los grupos de ambas cámaras a dirigentes de la etapa anterior que la apoyaron como Fernando Martínez Maillo y Javier Arenas.

Casado ha presidido una reunión con los grupos del PP de las Cortes en la que ha anunciado varios cambios en sus direcciones y en diversos puestos, y en la que ha pedido a todos hacer una oposición "responsable y contundente". Les ha instado además, según fuentes populares, a que no basen su discurso en el "no es no" como hacía Pedro Sánchez antes de llegar a la Moncloa, sino que expongan dicha oposición "con argumentos".

Casado ha expuesto su propuesta de que tres exministros presidan comisiones del Congreso: María Dolores de Cospedal, la de Exteriores; Rafael Catalá, la de Interior, e Íñigo Méndez de Vigo, la de Educación.

Aunque sólo uno de ellos, Méndez de Vigo, es afín a Sáenz de Santamaría, fuentes de la dirección del grupo popular han asegurado además que la intención de Casado es seguir integrando exministros dándoles otras presidencias de comisiones, como es el caso de Fátima Báñez y Álvaro Nadal, que estuvieron en la campaña.

Soraya Sáenz de Santamaría ha estado en esta reunión aunque sólo unos minutos, porque tenía que marcharse de viaje según han asegurado fuentes populares. La rival de Casado en las primarias sigue sin aceptar el puesto en el Comité Ejecutivo Nacional del partido, y tampoco aparece su nombre entre los cambios en el grupo parlamentario.

Cambios en los que sí se confirma la presencia del ex coordinador general del PP Fernando Martínez-Maillo como uno de los portavoces adjuntos en el Congreso, del mismo modo que el vicesecretario de Política Autonómica y Local, Javier Arenas, continúa en la dirección del grupo en el Senado como portavoz adjunto.