"Si el Gobierno de España sigue prestándose al chantaje de los secesionistas, solicitaremos la aplicación del artículo 155". Por segunda vez desde su elección como líder del PP, Pablo Casado amenaza con hacer valer la mayoría absoluta que ostenta su partido en el Senado para asumir las competencias de la Generalitat.

Desde Córdoba, en su primera visita a Andalucía como presidente del partido, Casado anunció que, de mano, el PP registrará mañana una proposición de ley para reintroducir en el Código Penal los delitos de sedición "impropia" y de convocatoria de referéndum ilegal, una amenaza que ya había blandido.

El objetivo, explicó, es "fortalecer las instituciones" y dar "estabilidad política". Y aseguró que si el PSOE no hubiera suprimido en 1992 el delito de sedición impropia, se "hubiera evitado el asalto a la Consejería de Economía" de la Generalitat (el 20 de septiembre de 2017), ya que "se penalizaría a los funcionarios que se inhiben de no evitar agresiones a los agentes o ataques a cordones policiales".

En clave interna, Casado transmitió el mensaje de que "el Partido Popular ya no está en funciones", sino que "ha vuelto, después de un período interno, y ha vuelto para quedarse, para pisar la calle, para no parar ni en agosto", asegurando, ante una posible convocatoria anticipada de elecciones generales, que, "convoquen cuando convoquen, vamos a ganar".