La célula terrorista de Ripoll financió los atentados del 17 de agosto en atentados del 17 de agosto Cataluña a través de microcréditos de concesión rápida y de la venta de joyas. Así lo recoge el sumario de la causa que investiga el juez Andreu.

Algunos terroristas contactaron con diversas empresas financieras para pedir créditos rápidos usando identidades falsas, tal y como revela el sumario. Las cantidades nunca superaron los 300 euros.

Pero la célula de Alcanar también sacó dinero en efectivo para financiar los ataques. El sumario recoge cómo de Mohamed Hichamy, uno de los terroristas abatidos en Cambrils, y Younes Abouyaqooub, autor material del atropello en Las Ramblas, recibieron un sobre en efectivo en una entidad bancaria días antes de los atentados.

Paralelamente, desde el 12 de agosto, varios terroristas se dedicaron a la venta de oro para conseguir ingresos. Youssef Aalla, fallecido en la explosión de Alcanar, fue uno de ellos.

El joven acudió a dos locales de Vinaroz (Castellón) en los que aportó su permiso de conducir español como identificación pero no su dirección, alegando que estaba de vacaciones.

La primera vez obtuvo 800 euros y aunque en la segunda ocasión la dependienta valoró las piezas en 814 euros, el trato se rompió al sospechar ésta que podían ser robadas.

Mohamed Houli, herido en Alcanar y actualmente en prisión, fue a las mismas tiendas por separado y se identificó con su DNI.

En una de las tiendas vendió una medalla, dos alianzas, un juego de pendientes, dos anillos y una pieza suelta que la dependienta valoró en 550 euros; la víspera de los atentados, consiguió en otra 1.180 euros por 18 pendientes, 4 anillos, 2 cadenas, 6 colgantes y una pulsera.