Un nuevo escándalo se cierne sobre la Universidad Rey Juan Carlos (URJC). El Juzgado de Instrucción número 40 de Madrid investiga la convalidación por ese centro de 500 títulos de Derecho a ciudadanos italianos por si en ella hubieran concurrido irregularidades.

Con la convalidación, los licenciados italianos lograban colegiarse sin tener que cursar en su país un máster en Ciencias Jurídicas que les costaba unos 18.000 euros. En España, pagaban 11.000 euros a la URJC y después se colegiaban a través del Colegio de Abogados de Madrid (ICAM) o de otros colegios del país, con lo que quedaban facultados para ejercer la abogacía en toda la UE.

El origen de esta causa se remonta a julio de 2016, cuando el Observatorio contra la Corrupción presentó una denuncia ante la Fiscalía de Madrid por un presunto fraude de la URJC en la convalidación de los títulos.

El escrito señalaba que el 28 de mayo de 2016 se celebró "un examen o prueba de conjunto a un número muy elevado de alumnos, todos de nacionalidad italiana -más o menos unas quinientas personas- con el fin de obtener, al margen del procedimiento de homologación, el título de Licenciado en Derecho". La denuncia aludía al "muy llamativo" hecho de que el día 28 de mayo de 2016 hubiera habido hasta ocho autobuses desplazándose desde la madrileña estación de Atocha hasta la URJC "como si fueran de excursión".

Por otra parte, según informó ayer la agencia "Efe", el exdirector del ya clausurado Instituto de Derecho Público de la URJC -que concedió los polémicos másteres de Cristina Cifuentes y Carmen Montón- Enrique Álvarez Conde y su número dos en ese organismo, Laura Nuño, se repartieron más de 213.000 euros en sobresueldos procedentes de las cuentas del Instituto, que manejaba el catedrático. Entre 2012 y 2017, Álvarez Conde se hizo a sí mismo transferencias por 123.589 euros, la mayoría de ellas sin precisar el concepto, mientras que Nuño recibió otros 90.234 euros. En total, 213.823 euros.