El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha asegurado este miércoles que no ha visto "ningún tipo de zigzagueo ni de posibilidad de adelanto electoral" en la hoja de ruta de Pedro Sánchez, tras la reunión de dos horas que han mantenido en Moncloa: "No va a ser Torra quien convoque las elecciones en España", ha resumido.

Puig, que ha trasladado a Sánchez su "apoyo claro" a lo que éste está haciendo para afrontar el conflicto de Cataluña, "alejándose de la confrontación, buscando desde una posición proactiva el diálogo y preservando la ley", ha dicho también que le ha visto "muy persuadido" de poder conseguir la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2019, lo que supondría para él un "avance".

Tras una reunión que ha calificado de "intensa" y "productiva", el president de la Generalitat se ha mostrado convencido de que Sánchez tiene el "ánimo" y la "determinación clara" de que su Gobierno sea una "factor decisivo de estabilidad para la sociedad española".

"Le he visto con una hoja de ruta clara de estabilización del país y de aprovechar el momento para avanzar en políticas de progreso y en recuperación de derechos perdidos", ha explicado.

Durante el encuentro, en el que los dios presidentes han hablado, no solo de la agenda valenciana, sino también de política nacional, Puig ha traslado al presidente español su "absoluta lealtad reivindicativa y de cooperación para ayudar a resolver los conflictos territoriales" que tiene planteados.

El presidente valenciano ha defendido que la posición que está manteniendo el Gobierno de Sánchez es la "necesaria", porque combina "legalidad" con "diálogo", mientras que, a su juicio, la vía que abrió ayer Torra -amenazándole con retirarle el apoyo parlamentario sin en un mes no presentaba una propuesta de referéndum de autodeterminación- "no tiene que ver con la sensatez".

También ha criticado a la "derecha española" por ocuparse más de "cultivar las estridencias que de buscar soluciones" y ha lamentado que haya "personas que quieran explotar electoralmente hasta el final" el conflicto soberanista, incluidos "algún expresidente del que sabemos su aportación a la historia del independentismo".

Tras admitir que la situación es complicada, Puig ha insistido en que Sánchez es consciente de que tiene abierta la vía del diálogo para "intentar más pronto que tarde encontrar soluciones" que pasen por una nueva arquitectura constitucional.

A su juicio, la "única solución" para Cataluña es la hoja de ruta que ha diseñado el Gobierno de Sánchez, con la que cual ha dicho sentirse "comprometido" y "vinculado".

Durante el encuentro han hablado también del Brexit y Puig ha tachado de "ridículo que haya quien bromee con la importante actividad internacional" del presidente, después de los "costes" que en su opinión ha tenido para los ciudadanos la ausencia de esa actividad por parte del Gobierno de Mariano Rajoy durante los últimos años.