Cajeras de supermercado, mozos de almacén o teleoperadores. Son algunos de los trabajos, que en Asturias tienen en nómina a miles de empleados, que más se podrían beneficiarse del pacto entre el PSOE y Podemos, incluido dentro del proyecto para las Presupuestos Generales del Estado, para que el salario mínimo interprofesional (SMI) llegue en 2019 a los 900 euros. De concretarse esta subida, el sueldo para esos oficios citados en las primeras líneas podrían subir hasta unos 150 euros al mes. Depende de la categoría del empleado.

Es el sector de los servicios donde se concentran la mayor parte de los trabajadores que podrían verse favorecidos por el incremento en los sueldos más bajos, aunque el anuncio ha pillado con el pie cambiado a los sindicatos, que aún están dirigiendo y analizando cuáles son los convenios en Asturias que no llegan a esa barrera de los 900 euros y cuál puede ser el alcance real de la medida.

Entrando en harina, la mayor actualización de los sueldos podría tener que darse en los supermercados asturianos y, más concretamente, entre los que están acogidos al convenio de minoristas de alimentación y cuyas negociaciones para actualizarlo están atascadas en la región. Los sindicatos reclaman para estos empleados una subida de las nóminas por encima del 3%, que los empresarios consideran inasumible. Las centrales argumentan que las ventas de estos establecimientos está subiendo con fuerza debido a la recuperación del consumo. Dentro de los supermercados, los sindicatos aseguran que hay dos categorías profesionales en las que las nóminas a menudo no llegan a los 780 euros al mes. Se trata de la de ayudante de dependiente y la de mozo de almacén. En ambas están empleadas miles de personas.

Una situación análoga puede darse en algunos comercios donde las nóminas de los trabajadores están lejos de esos 900 euros o en algunos centros de atención telefónica (los llamados "call centers"), donde los sueldos son también exiguos.

Algunos estudios indican que el número de personas que en España cobran el salario mínimo no pasa de 533.000 trabajadores, en su mayoría, mujeres, jóvenes y asalariados con empleos de baja cualificación.

Los que no están tan contentos con la subida son los autónomos. El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, avisó de que los empleados por cuenta propia que cotizan por la base mínima, que suponen el 85% del total, tendrán que pagar 420 euros más al año a la Seguridad Social si el salario mínimo sube a los 900 euros. La misma alerta lanzó el secretario general de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), Eduardo Abad, que pidió al Gobierno un "cortafuegos" para evitar ese aumento en las cotizaciones. El acuerdo entre el PSOE y Podemos sí incluye el compromiso para reformar el sistema de cotización para vincularlo a los ingresos reales de los autoempleados, lo que bajaría el coste para los que menos ganan.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) instó ayer al Gobierno a que sea "cuidadoso" a la hora de implementar la propuesta de subida del salario mínimo. "Hay que ser cuidadoso, por un lado para no excluir a gente del mercado laboral. Pero, por otro lado, también hay justificación por cuestiones sociales", explicó Poul Thomsen, director del Departamento de Europa del FMI.