Génova movió ficha ayer en la disputa interna del PP asturiano, que ha terminado de estallar en plena convención nacional después de que la presidenta regional del partido, Mercedes Fernández, expresase su malestar por el relevo al frente de la lista electoral autonómica impuesto por la dirección nacional de Pablo Casado.
El encargado, una vez más, de salir al quite por la situación del PP asturiano fue Javier Maroto, vicesecretario de Organización, que echó un capote a la candidata al Principado, Teresa Mallada, y con tono de advertencia a quienes se enroquen en la defensa de que Mercedes Fernández debería repetir como aspirante en las elecciones autonómicas de mayo.
"El PP ha hecho una apuesta de futuro en Asturias y se llama Teresa Mallada. Quien quiera apuntarse al futuro tiene que apuntarse a Teresa Mallada, la mejor candidata. En las encuestas del partido es la única candidata que daba opciones muy positivas, no sólo entre votantes del PP, sino también entre los de Ciudadanos y Foro para recuperar el Gobierno. Tenemos que reagrupar al centro-derecha en Asturias", aseguró Maroto, que también fue uno de los encargados, en su momento, de comunicar a Mercedes Fernández que no sería cabeza de lista en Asturias.
Mallada, por su parte, eludió replicar a Mercedes Fernández, remitiéndose a las palabras de Maroto. Pero sí afirmó sentirse "absolutamente apoyada por la dirección nacional". Y agregó: "Estoy aquí con un objetivo clarísimo, que es conseguir todo el apoyo que pueda de la dirección nacional del partido para sacar adelante mis propuestas para Asturias. El partido está unido, aquí están todos. Y lo que queremos es únicamente trabajar y trabajar para que en Asturias gobierne el PP", aseguró la política allerana, expresidenta de Hunosa, quitando hierro a la tensa relación con Mercedes Fernández.
"La presidenta está ahí, tiene su hueco. Es el hueco mas importante en el partido. Ella es presidenta, yo la candidata, todos somos afiliados del PP y todos vamos a trabajar para ganar las elecciones", zanjó Mallada.
