La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, reprochó ayer a la familia de Franco la "cadena de obstáculos" a la exhumación de los restos del dictador del Valle de los Caídos, que "son todos (obstáculos) a la democracia española". En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Calvo no concretó si será posible la exhumación antes de las elecciones. "Ni yo ni nadie podría decir cuáles van a ser los siguientes avatares", señaló la vicepresidenta. Los Juzgados de lo Contencioso-Administrativo de Madrid tramitan actualmente hasta diecisiete procedimientos en los que se demanda la suspensión cautelar de la licencia administrativa para la exhumación. Calvo señala que a "los actos del Gobierno sólo puede entrar el Tribunal Supremo" y que todos esos procedimientos afectan a "elementos muy secundarios", que no alteran "para nada" las previsiones del Ejecutivo. La vicepresidenta asegura que la Iglesia no podrá oponerse a la exhumación.