Era el "campeón del mundo de mus". Él mismo ironizaba así con su compañero Félix Obeso cuando jugaba su partida diaria contra Jaime Lissavetzky y su compañero de turno. Sus vacaciones veraniegas en Bricia de Llanes, sus baños en Toranda, la tranquila playa de Niembro, pasaban habitualmente por la partida de cartas en La Parrera a la hora del café. Normalmente en bañador y con un habano en la boca, disfrutaba también últimamente haciendo tertulia en la casa de El Pradón, en Balmori, con sus compañeros de colegio, José María y Leopoldo Pardo Serrano. Este político, sempiterno dialogante, entrañable amigo de sus amigos, disfrutaba charlando con su compañero Lissavetzky, con Obeso en su restaurante frente a la ría del Bau, la ensenada de Barro, y con los hermanos Pardo, a quienes "llevaba" al colegio de El Pilar, en Madrid, hace ya medio siglo. Pura humanidad. Llanes llora hoy a un amigo. Descanse en paz