Lo primero, las pensiones. El nuevo Gobierno aprobó ayer un Real Decreto-ley por el que las pensiones, tanto contributivas como no contributivas y de clases pasivas, subirán este año un 0,9% con carácter retroactivo desde el 1 de enero. El Consejo de Ministros, en su primera reunión tras formaerse el nuevo Ejecutivo de coalición, acabó con la congelación de las prestaciones, una medida que afecta a cerca 284.000 asturianos, que verán incrementadas sus pagas en una media de 10 euros al mes.

Por contra, la anunciada subida del salario de los funcionarios -medida que afecta a más de 57.000 asturianos- queda pendiente, al igual que el alza del salario mínimo interprofesional (SMI) y la actualización del indicador público de rentas múltiples (IPREM), que se utiliza, entre otros cometidos, para fijar la cuantía de subsidios de desempleo que cobran al menos 10.000 asturianos. Seguirán congelados. "Tenemos mucho tiempo por delante", señaló el presidente Pedro Sánchez, que a preguntas de los periodistas -hacía semanas que no las aceptaba- evitó fijar plazos.

De momento, el Gobierno aprobó ayer subir las pensiones el 0,9% desde el 1 de enero, un incremento que tiene un coste de 1.406 millones de euros y que comenzará a pagarse en la nómina de febrero. Con esta subida "no habrá ninguna merma de poder adquisitivo", dejó claro el presidente Pedro Sánchez, que destacó que los pensionistas percibirán una paga compensatoria, "antes de abril de 2021", si la inflación del año supera dicho incremento. Sánchez explicó que con esta subida, que responde a la estimación media de inflación que hace el Gobierno, cumple el compromiso con los casi 10 millones de pensionistas y corrige "el techo del 0,25%" que les supuso la perdida de poder adquisitivo. El presidente del Gobierno se refirió así al índice de revalorización (IRP) que aprobó el ejecutivo de Mariano Rajoy en 2013 y que introdujo una fórmula para calcular la subida anual de las pensiones que estaba marcada por la situación financiera del sistema, de forma que si la Seguridad Social estaba en déficit solo se garantizaba una subida mínima anual del 0,25 %. No obstante, Sánchez señaló que el decreto ley no deroga la reforma de las pensiones sino que "orilla" el actual índice del 0,25%, "a la espera de llegar a un acuerdo" en el Pacto de Toledo y en el diálogo social que ligue "la revalorización de las pensiones conforme al coste de la vida".

La medida aprobada ayer beneficia a 9.801.016 pensiones contributivas (273.000 en Asturias), que supondrán un coste de 1.229 millones de euros, mientras que el resto (655.000 de clases pasivas, 451.156 no contributivas y 195.000 hijos a cargo con discapacidad mayor o igual al 65%) apenas representarán un gasto de 177 millones.

Los atrasos correspondientes al mes de enero se incluirán en la nómina de febrero, ya que ha sido preciso el desarrollo de un aplicativo informático específico para el abono de la subida correspondiente. Tras la revalorización, la pensión media de los asturianos, que era de 1.173,82 euros, subirá 10,56 euros al mes.

Desde el ámbito sindical, el alza de las pensiones ha sido bien visto tanto por CC OO como por UGT, si bien lo han considerado "parcial" ya que no ha sido superior para las prestaciones mínimas y han urgido al Gobierno a derogar la reforma de 2013.