Los trabajadores de Nissan han ratificado este jueves por unanimidad el preacuerdo alcanzado el miércoles entre los sindicatos y la dirección de la automovilística para cerrar las plantas barcelonesas de Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca en diciembre de 2021.

Según han informado CCOO y UGT, los trabajadores se han reunido esta mañana en asamblea en la planta de Nissan en Montcada i Reixac para votar el acuerdo, que prevé que no haya despidos forzosos hasta finales del próximo año, una vez la multinacional cese su actividad.

Durante la asamblea se ha valorado el hecho de que se ha alargado 17 meses la producción y el mantenimiento de la ocupación, ya que se ha pospuesto el cierre a diciembre de 2021 -la idea inicial de la empresa era hacerlo en diciembre de 2020- y no habrá despidos traumáticos hasta esa fecha.

Los representantes sindicales también han destacado que este tiempo permitirá trabajar en la búsqueda de un proyecto de reindustrialización en una mesa tripartita con el Gobierno y la Generalitat, así como el plan de prejubilaciones e indemnizaciones con preferencia de recolocación en la futura nueva empresa.

Los trabajadores de entre 51 y 55 años podrán prejubilarse con convenio especial hasta los 63 años con diferentes porcentajes del salario neto: desde el 75 hasta el 90 % de los nacidos en 1965.

En el caso de trabajadores que quieran desvincularse de forma voluntaria, recibirán, sin tope, 60 días por año trabajado, y a los que se vayan a la nueva empresa se les abonarán 50 días por año trabajado y un lineal de 750 euros por año de antigüedad, también sin tope.

Los empleados de Nissan, además, tendrán preferencia a la hora de optar a las contrataciones de los futuros inversores industriales que se instalen en las plantas de la automovilística.

A cambio, la plantilla dejará la huelga indefinida que lleva a cabo desde hace tres meses y retomará la producción a finales de agosto.

CCOO ha asegurado que el sindicato seguirá trabajando en el reto de la reindustrialización para conseguir inversiones, mantener el tejido industrial del sector en el territorio y proteger el empleo de los proveedores.

En este sentido, CCOO anima a los proveedores a que negocien también teniendo como base el acuerdo alcanzado ayer.

Por su parte, UGT ha hecho una valoración positiva del acuerdo y ha destacado que con voluntad de diálogo se abren las posibilidades de acuerdo pero que, sin esta predisposición, las posibilidades de son nulas y "crece la crispación".