El tribunal de la Audiencia Nacional que está juzgado a tres presuntos miembros de la célula yihadista que atentó en Cataluña ha visionado este miércoles las imágenes de las cámaras de seguridad de la Guardia Urbana que grabaron el atropello masivo que tuvo lugar en la tarde del 17 de agosto de 2017 en Barcelona, que dejó 14 víctimas mortales.

La sexta jornada del juicio ha estado marcada por las declaraciones de los agentes de los Mossos d'Esquadra que se encargaron de analizar tanto estas grabaciones como las de la huida de Younes Abouyaaqob, autor material del atropello, a través del mercado de la Boquería.

Ha sido uno de estos agentes quien, antes de que se mostraran las duras imágenes en la Sala, ha descrito la trayectoria que siguió la furgoneta una vez entró en La Rambla. "Hace un recorrido en forma de 's' yendo a buscar donde hay más concentración de gente en La Rambla en aquel momento", ha concluido, a preguntas de una de las acusaciones.

"El vehículo entra procedente de la calle Pelayo, entra al canal central de La Rambla, dejando a la derecha un monolito, y primero se incorpora hacia la izquierda, en la parte central donde hay un cúmulo de gente importante. Después gira hacia la derecha en dirección a un kiosko donde hay máxima concentración de gente para enderezar el vehículo y volver a girar otra vez a la izquierda para ir otra vez al sitio donde hay mas concentración de gente", ha narrado.

La huida

Tanto este testigo como otros agentes que han comparecido en la vista oral han explicado que también hicieron un seguimiento del autor del atropello durante su huida a pie por el mercado, donde se cruzó con otras personas pasando desapercibido, hasta la Diagonal de la capital catalana, donde mató a Pau Pérez, conductor del vehículo con el que continuó su fuga hasta Sant Just Desvern (Barcelona).

Los testigos que revisaron las cámaras de seguridad han apuntado que perdieron la pista de Younes Abouyaaqoub la noche del 17 de agosto y que le volvieron a encontrar tres días más tarde cuando fue abatido por los Mossos d'Esquadra en Subirats (Barcelona).

En este sentido, han señalado que la última imagen que captó de él el helicóptero de la policía autonómica les permitió identificar, posteriormente, a Abouyaaqoub en grabaciones de días después en las que aparecía con ropa distinta a la que llevaba en La Rambla e incluso buscando en la basura de un contenedor de una gasolinera.

Por otro lado, el tribunal de la Sección Tercera de la Sala de lo Penal ha escuchado las declaraciones de los agentes de Mossos d'Esquadra que hicieron la inspección ocular de tres furgonetas: la que condujo Abouyaaqoub; otra del imán de Ripoll Abdelbaki Es Satty, a quien se considera líder de la célula que atentó en Cataluña; y una tercera que abandonó Mohamed Hichamy el mismo día del atentado tras tener un accidente.

Los mossos que se encargaron de la revisión de la furgoneta que atropelló a centenares de personas en Barcelona han recordado, al igual que ya han manifestado otros testigos en las sesiones anteriores del juicio, que en ella se encontró el contrato de alquiler de la misma a nombre del acusado Driss Oukabir.

Asimismo, además de recoger la cartera de Aboouyaaqoub, hallaron el pasaporte del también acusado Mohamed Houli, lo que permitió relacionar el atentado con la casa de Alcanar (Tarragona) que explotó la noche anterior, pues éste se encontraba en ese momento hospitalizado como único superviviente de la explosión.

El mapa

Sobre la furgoneta del imán Abdelbaki Es Satty, otro de los mossos ha relatado que, además de encontrar documentación relacionada con un viaje a Marruecos entre el 19 de julio y el 9 de agosto de 2017 para vender electrodomésticos, aparece una "copia de un mapa hecho a mano, que tenía marcado en círculos azules una serie de poblaciones de la zona de Ripoll".

Ha apostillado que le dio importancia porque Houli, en una de sus declaraciones tras ser detenido, afirmó que creía que el imán "escondió explosivos o elementos para fabricarlos en algún zulo en la montaña, sin dar más detalles". No obstante, tras la comprobación de la zona por orden del jefe de los Mossos que dirigió la investigación, se concluyó que este documento no tenía ninguna relación con el "intento de realizar atentados".

"Eran inicios de vías principales en las que salen caminos que suelen ser utilizados por senderistas o ciclistas porque coincide con ruta del Ferro (Hierro) en la zona de Ripollet", ha agregado.

Furgoneta abandonada

Por último, otro de los agentes de la policía autonómica que ha testificado ha contado que fue alertado de que una furgoneta había sido abandonada en la AP-7 tras un accidente el 17 de agosto de 2017. Cuando acudía hacia allí junto a su compañero, vio a una persona "andando por la autovía", si bien descartó que pudiera ser Mohamed Hichamy al suponer que si hubiera tenido algún tipo de relación con el accidente, habría huido "corriendo".

Se dio cuenta de que sí era quien buscaban "10 segundos después" cuando la segunda patrulla que había sido alertada de la emergencia comunicó la descripción del conductor de la furgoneta accidentada y coincidía con la apariencia de la persona que habían visto.

"Es en ese momento cuando lo relaciono y damos la vuelta, pero no lo encontramos", ha dicho el testigo. Hichamy, abatido más tarde por los Mossos en Cambrils, fue recogido por sus compañeros y se dirigieron esa tarde al paseo marítimo de Cambrils (Tarragona), donde dejaron otra víctima mortal.