El Gobierno Vasco no impondrá nuevas restricciones a la actividad de la hostelería, aparte de las que están actualmente vigentes respecto a horarios y aforo, a pesar del auto del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que autorizó reabrir estos locales en los municipios más afectados por la pandemia.

Los servicios jurídicos del Gobierno Vasco han decidido además no presentar un recurso de casación contra esa decisión ya que solo se puede recurrir ante la misma Sala y los mismos magistrados "y no existe la posibilidad de aportar nuevas pruebas" por lo que tendría "pocas posibilidades" de prosperar, ha confirmado el lehendakari, Iñigo Urkullu.

Este viernes se ha reunido el consejo asesor del Plan de Protección Civil de Euskadi (LABI), presidido por el lehendakari, para analizar la evolución de la COVID y la efectividad de las medidas establecidas para hacer frente a la expansión de la enfermedad.

La reunión ha estado marcada por el auto del TSJPV del pasado martes que aceptó cautelarmente la petición de las asociaciones de hostelería de permitir la reapertura de bares y restaurantes en los municipios con una tasa acumulada en catorce días superior a los 500 casos por 100.00 habitantes.

Este consejo asesor ha decidido mantener las actuales restricciones que consisten en que la hostelería debe cerrar desde las 20:00 horas hasta las 6:00, con un aforo máximo del 50 % en el interior y del 100 % en las terrazas, sin que se puedan reunir más de cuatro personas en una mesa y sin opción a consumir en barra.

Tras confirmar que no se recurrirá el auto, Urkullu se ha mostrado convencido de que la razón asiste al Gobierno Vasco "y se probará cuando se dilucide el fondo de la cuestión".

Ha asegurado que el Gobierno comparte pero no entiende el auto judicial y ha avanzado que el miércoles pidió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que acuerde con las comunidades los mecanismos legales necesarios, en el marco del Estado de Alarma, para que las decisiones adoptadas cuenten con "todas las garantías jurídicas".

Esta petición la hizo a través de una carta y todavía, ha dicho, no ha recibido respuesta. Ha recordado que es la demanda que viene reclamando, como otros presidentes de comunidades autónomas, desde el pasado mes de marzo para que el Gobierno ofrezca "herramientas jurídicas" respecto a las medidas que se adoptan.

Ha considerado que es evidente la relación entre cerrar la hostelería en estas localidades en zona roja y la evolución positiva epidemiológica de los últimos días. El problema, ha añadido, está en el agrupamiento de personas, el tiempo del mismo y la relajación de las medidas.

El lehendakari también se ha pronunciado sobre el presidente de la sala del TSJPV que ha adoptado esa decisión, Luis Ángel Garrido, quien en una tertulia radiofónica un día antes de dar a conocer este auto criticó las medidas anticovid y a los epidemiológicos, a quienes calificó como "médicos de cabecera que han hecho un cursillo".

"Es curioso", ha indicado Urkullu, que el magistrado se pronuncie así públicamente un día antes de emitirse el fallo.

No obstante, ha dicho que el Ejecutivo no está estudiando recusar al juez Garrido porque no es una actuación de confrontación del juez contra el Gobierno Vasco sino contra los criterios epidemiológicos, y contra los criterios de los profesionales sanitarios.

El Gobierno Vasco, ha continuado, va a seguir adoptando las decisiones necesarias para preservar la salud de las personas. "Lo vamos a hacer con todas las competencias a nuestra disposición y tratando de garantizar la seguridad jurídica de cada decisión", ha incidido.

Ha insistido en que no existe ninguna duda de que cifras superiores a 500 casos deben considerarse como de alto riesgo para la salud pública, principalmente espacios cerrados con deficiente ventilación y sin protección.

Movilidad entre municipios colindantes

Por otro lado, el LABI ha acordado mantener el confinamiento municipal, pero se permitirá la movilidad entre municipios colindantes para la realización de actividades socio económicas y deportivas al aire libre.

Según ha precisado Urkullu, el nuevo decreto mantiene el confinamiento municipal, pero plantea dos excepciones. Por una parte, se permitirá la movilidad entre municipios colindantes de tránsito habitual para la realización de actividades socio económicas y deportivas al aire libre.

Además, se definen con mayor precisión los supuestos en que la movilidad entre municipios está permitida como pueden ser entrenamientos y competiciones deportivas de los equipos en competición profesional o semi-profesional y movilidad entre municipios con Tasa de incidencia inferior a 500 para competiciones y entrenamientos de deporte federado, entrenamientos de deporte escolar, así como cursos o actividades programadas en gimnasios, clubs o polideportivos.