El elevado ritmo de la vacunación en España tiene su consecuencia más clara en el descenso de la tasa de mortalidad por covid-19. En marzo y abril del pasado año, era del 13%. En las olas sucesivas, el porcentaje descendió hasta el 2%. Pero ahora, con el 35% de la población con la pauta completa (el país se encuentra en el ecuador del objetivo de conseguir a finales de agosto el 70%, umbral que supondría alcanzar la llamada inmunidad de rebaño) y más de la mitad con al menos una dosis, se sitúa en el 0,2%. Es decir, de cada 1000 casos de coronavirus, fallecen dos. 

En los últimos siete días, la cifra de decesos ha sido de 34, según los datos del Ministerio de Sanidad, aunque al ser lunes puede haber habido algún retraso en las notificaciones. “Son cifras muy inferiores a las que observábamos en las semanas previas”, señaló el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón. La evolución, continuó, también se refleja en la situación de los hospitales: el 7% de las camas de las unidades de cuidados intensivos están siendo ocupadas por pacientes covid; en las camas de planta, el colectivo supone alrededor del 2%. 

Esta espectacular caída de la mortalidad, sin embargo, coincide con un ligero aumento en los contagios. La incidencia acumulada en los últimos 14 días subió este lunes cinco puntos, hasta los 100 casos por 100.000 habitantes. La subida solo se da entre los grupos de no vacunados, los más jóvenes, y coincide con el inicio de las vacaciones de verano y las fiestas de fin de curso, cuya expresión más grave se ha vivido en Mallorca, donde 249 jóvenes guardan cuarentena en un hotel en Palma, tras haber tenido contacto con el megabrote en la isla. 

Un impacto menor

"Es esperable que haya algo más de interacción entre los jóvenes después de un año y medio de pandemia. No podemos pensar que esto no iba a pasar. Afortunadamente, son grupos en lo que, aunque el virus tiene un impacto sobre su salud, es pequeño en comparación con los grupos que hemos conseguido vacunar", explicó Simón, que no atribuyó la subida de los contagios a la variante delta, conocida popularmente como india. Ante esta evolución de la pandemia, en la que las transmisiones bajan radicalmente entre los grupos inmunizados y ascienden entre los que no han recibido ninguna dosis, Sanidad empezará a partir del martes a ofrecer datos de contagios según los grupos de edad, algo que hasta ahora no hacía. 

Mientras tanto, la vacunación continúa batiendo récords. A lo largo de esta semana, llegarán a España 6.697.430 dosis. Pero Simón pidió prudencia. “Hasta que no se consigan las coberturas adecuadas con la pauta completa tenemos que seguir observando medidas de precaución -concluyó. Mucho cuidado. Esto todavía no se ha acabado”.