Isabel Díaz Ayuso ha desactivado definitivamente la derogación de las dos leyes LGTBI propuesta por Vox en la Asamblea de Madrid, pero eso no significa que haya cesado también su intención de modificarlas. El Grupo Popular de la Cámara autonómica ha anunciado este miércoles que no apoyará en el pleno de este jueves la tramitación de la Ley de Igualdad presentada por Rocío Monasterio una vez que ha constatado que su negativa no pone en peligro el apoyo de Vox a sus presupuestos, que se votarán la próxima semana.

El anuncio coincide con la convocatoria del colectivo LGTBI+ de Madrid, COGAM, para esta tarde en la Puerta del Sol, precisamente, como protesta ante la propuesta de la ultraderecha que se votará mañana y a la que acudirán previsiblemente todos los grupos de izquierda con representación en la Asamblea. Pero el rechazo de Ayuso a la iniciativa de Vox no desactivará la manifestación porque sigue vigente entre los populares madrileños la idea de modificar tanto la Ley de Identidad y Expresión de Género e Igualdad Social y no Discriminación, como la Ley de Protección Integral contra la LGTBIfobia.

El portavoz del PP en la cámara autonómica, Alfonso Serrano, argumenta que su partido se abstendrá en el pleno de este jueves porque consideran que la propuesta de la formación de Santiago Abascal "tiene muchas deficiencias técnicas" y, además, consideran que "no es la herramienta para modificar determinadas leyes". El dirigente popular indica que su grupo ha abierto "un diálogo" para reformar los "aspectos puntuales de estas leyes que son mejorables", y reconoce que Vox ha rechazado la propuesta inicial que le han presentado para la modificación de estas normas antes de anunciar su abstención, pero ahora esperan que Vox vuelva con una contrapropuesta para dar continuidad a ese "diálogo".

Próximo desenlace

¿Podría el PP seguir intercambiando papeles con Vox sin llegar a ningún puerto durante los próximos meses? Una vez superado el escollo de los presupuestos, la necesidad parlamentaria de Ayuso es muy limitada, al menos, para seguir garantizando su gobernabilidad. Algunos proyectos podrían no salir si Vox se plantara y los rechazara, pero no afectaría a los asuntos principales de la gestión del Gobierno autonómico.

Sin embargo, desde el grupo popular niegan que la intención sea dar largas a nadie, dicen que están "convencidos" de que es necesario modificar algunos artículos de estas dos leyes. El consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Enrique López, es quien lleva las negociaciones de la letra pequeña de esta negociación, y esta mañana ha asegurado públicamente que siguen trabajando "en la mejora técnica" de los textos, pero sin especificar cómo avanza el intercambio de pareceres con Vox.

Tampoco en el grupo parlamentario ponen fecha o forma a cómo se desarrollará esa modificación. "Podría ser a través de una propuesta de Vox o del propio grupo popular", explican, también como una modificación impulsada desde el Consejo de Gobierno, pero, insisten ante la idea de que Vox pueda malinterpretar esta abstención, que su intención es seguir hablando con ellos para llegar a un texto consensuado. "Lo que tenemos que hacer es trabajar con seriedad y rigor y, desde luego, no vamos a hacerle el juego a la izquierda dándole nuestro voto, que lo que pretende es adueñarse de banderas que no le pertenecen", rematan en el grupo popular.