El comisario José Manuel Villarejo maniobró ante policías y jueces para tratar de salvar de la Justicia al comerciante de armas Abdul Rahman El Assir, en búsqueda y captura desde el 6 de marzo de 2020, tras no presentarse en un juicio que se tenía que celebrar en la Sección 15 de la Audiencia Provincial de Madrid, según consta en sus diarios, a los que ha tenido acceso EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, diario perteneciente al mismo grupo editorial que este medio. La Fiscalía reclamaba para El Assir una pena de ocho años de prisión y el pago de una multa de 73.923.014 euros, y que además indemnizara a la Hacienda Pública en concepto de responsabilidad civil con el abono de 14.784.602 euros. Pese a esta fuga de la Justicia y el impago de sus obligaciones fiscales el rey emérito, Juan Carlos I, ha retomado su amistad con Assir durante su estancia en Abu Dabi, ciudad en la que residen ambos, según publicó El País.

El Assir es una sombra en los juzgados españoles. Perseguido por Hacienda por delito fiscal, fue cambiando de abogado y dilatando la causa. Sus letrados siempre anunciaban una inminente conformidad, la salida clásica para los delitos fiscales, en los que las acusaciones y las defensas pactan pena que no conllevan ingreso en prisión. El Assir alegaba dificultades para mover su dinero pero pronto dejó sus propiedades en España abandonadas y se escabulló. Fue retrasando los juicios hasta que la Justicia lo puso en busca y captura.

En 2016 ya estaba instalado en Suiza y fletó un avión privado para la jet que acudía a la boda de su hija. Para salir de Suiza hacia Abu Dabi con una orden de busca y captura española pendiente ha debido de usar otra identidad distinta a la suya. Algo que no será un problema para alguien con sus contactos. Ya en la causa en España tenía pasaportes de varias nacionalidades. Lo que no se conocía de su periplo es que había estado en contacto con el hombre clave en todas las salsas, el excomisario José Manuel Villarejo, y que este había maniobrado con la justicia para librarle de la acusación con contactos a todos los niveles.

La vinculación de Villarejo con Abdul Rahman El Assir se remonta al menos a noviembre de 2013 cuando el comisario conoce a Adrián de la Joya, un empresario que estaba casado con Cristina Fernández Longoriacuya hermana era cónyuge de El Assir: "Sujeto muy relacionado a tener en cuenta", redactó el presunto cabecilla del clan policial desarticulado por la Audiencia Nacional y la fiscalía anticorrupción con la Operación Tándem.

Y ya desde principios de 2014 Villarejo se pone en marcha para tratar de librar a El Assir de sus problemas con los juzgados españoles. Según las anotaciones de las agendas, en las que el comisario plasmaba sus actividades profesionales, Villarejo se puso en contacto al menos en tres ocasiones con el agente responsable de la denominada Operación Avispa contra el tráfico de armas: el comisario Juan Rueda, quien después fue nombrado subdirector general de Relaciones Internacionales de la secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior: "Varios avisos sobre la importancia de El Assir. Quedamos en seguir hablando del tema". "Toque sobre Assir, problema en el 94 venta armas Pakistán y Arabia Saudí". "Toque para enviar correo sobre datos de Interpol de Assir. Le pareció muy correcto. Muy receptivo a colaborar en tema Assir", escribió el comisario en su diario sobre sus primeros contactos con el comisario Rueda.

Avisó a su jefe

Pero Villarejo no solo se limitó a contactar con el comisario responsable de las pesquisas del caso Avispa, sino que también lo puso en conocimiento de sus jefes: el director adjunto operativo (DAO), Eugenio Pino, y el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, tal y como se puede leer en las anotaciones de finales de abril de 2014.

Sin embargo, el comisario no logró su objetivo, según redactó en su agenda, en la que de forma literal dice el 6 de mayo de 2014: "Juan Rueda. Aviso de dificultad para ayudar a El Assa. La jueza lo ve difícil". Villarejo escribe el nombre de este mercader en mayúsculas y de diferentes formas: "ASSIR". "El ASSA", "EL ASSAR" y "ASSAD".

El 13 de mayo de 2014 Villarejo da cuenta de una reunión mantenida en Ginebra con Al Assir y su cuñado, Adrián de la joya. Y más abajo alude a un caso de corrupción conocido en Francia como "Karachi-Sarkozy" y "1995 Eduard Balladur. Atentado de autobús de Pakistán 2002. Ganó Chirac. Muertos 11 ingenieros franceses. Juez Antiterrorista Jean Louis Bruguiere".

Assir fue condenado en rebeldía por el denominado Karachigate, en relación a la venta de armas de Francia en Pakistán. Una parte de las comisiones por la venta de submarinos financiaron la campaña a la presidencia de la República del primer ministro, Édouard Balladur, recuerda la información de El País.

Gestiones en los juzgados

Pero Villarejo también habría realizado gestiones en los juzgados de Madrid, siempre según los diarios de este policía que fueron requisados en un registro ordenado por la fiscalía Anticorrupción mientras el comisario permanecía en prisión preventiva. Acudió al entonces decano de los juzgados de Madrid, José Luis González Armengol, quien se comprometió a hablar con el juez titular del Juzgado de Instrucción número 52 de Madrid, que había imputado al comerciante de armas por varios delitos fiscales: "Fermín Echarri. Juez del 52 que lleva el tema El Assir. Abogado dice que si se desinfla todo termina en Francia", escribió.

El 23 de junio de 2014 Villarejo alude a una reunión con De la Joya y con "un enviado de El Assir", quien sería "Hugo Assir", sobre quien también escribe: "Muy contento con las explicaciones. Plantear el tema para resolverse sobre el verano". Y el 8 de julio de ese mismo año vuelve a escribir sobre lo que parece una reunión con el instructor del caso: "Fermín Juzgado 52. Muy correcto y receptivo. Quiere volver a la A.N. [Audiencia Nacional]. Se ve muy relacionado con Armengol".

Un día después, el 9 de julio de 2014, en la agenda también se plasma la opinión de otra persona a la que Villarejo identifica con el nombre de "GRANO". Y sobre él dice: "Muy contento con la impresión por la cita en el 52. Quedó en transmitir a El Assar las gestiones. Pendiente de recurso para...". El 3 de septiembre hay nuevas alusiones de Villarejo al caso: "De la Joya. Pendiente de mandar Nota sobre cuñado". Meses después, el 5 de noviembre de 2014. "Hugo" acudió "expresamente a recoger el informe". El propio "Assir" se mostró "muy contento con el informe emitido. Propone vernos mañana en Ginebra. No le puedo confirmar hasta 17 o 18", escribió Villarejo.

Viaje a Ginebra

De la Joya propone días después a Villarejo que se reúna con su cuñado en Ginebra, después de un viaje que llevan a cabo a Arabia Saudí con el supuesto colaborador del FBI José María Clemente Marcet. Esa reunión en la ciudad suiza se produce el 9 de enero de 2015. Y sobre ella el comisario apunta: "El ASS. Aparentemente OK. 7-8 ahora; 10 después y hasta 25 al final de todo". Por su parte, De la Joya se muestra "muy determinado a cerrar los temas. Le veo muy relacionado con El Assir", completa la anotación del diario del ex mando policial.

Con la salida de Fermín Echarri del juzgado, Villarejo traslada su atención a la magistrada que le sustituye: "Belén Sánchez Hernández. Juzgado de Instrucción número 39. Gafas, 50, [...] rigurosa. Se hace cargo de todo porque ya no está el titular. Toque a Armen para ayudarle. Grano dice que algo se está moviendo muy discretamente", completó el 2 de octubre de 2014 el comisario, quien llega asegurar que "GRANO", pese a que uno de sus recursos vencía el 30 de octubre no estaba muy preocupado: "Insiste en que confía en el apoyo que le damos", escribe Villarejo, quien alude a una reunión con De la Joya "GRANO" para preparar "el tema de Al Assar". Sin embargo, este letrado alerta al comisario el 14 de noviembre de 2014 de la existencia de un "nuevo escrito de la Abogacía del Estado sobre el tema El Assar" y su intención de recurrirlo, porque la Fiscalía de Delitos Económicos no lo había hecho.

El 8 de octubre de 2014 el comisario informa de sus actividades al secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, según las anotaciones de la agenda, que dicen: "Al Assir datos muy contundentes sobre movimientos de empresarios y políticos catalanes en Suiza". Sin embargo, el propio Martínez le contesta semanas después al comisario que un empresario le había acusado de relacionarse con Assir por "sus negocios".

Reunión con el decano

Pero la actividad de Villarejo no se limitó a tratar de convencer a policías y jueces de que exoneraran al cuñado de su socio, Adrián de la Joya. En sus diarios consta que el 27 de octubre de 2014 José Luis Armengol organizó una reunión con su sucesor en el decanato, Antonio Viejo, sobre quien escribe el comisario: "Muy correcto y cercano. Invitó a tomar café. Se habló de la instrucción de Fermín Echarri y el nuevo, aún por resolver". Ese primer encuentro se completó con una comida en la que también habría participado el entonces jefe de la UDEF, José Luis Olivera, quien ya conocía al decano.

Ese almuerzo se habría producido el 6 de noviembre de 2014, día en el que Villarejo hace varias anotaciones sobre el encuentro. "Olivera: comida con Viejo y Armengol". "Armengol: muy receptivo a todo tipo de apoyos. Se le ve muy tronco de Viejo". "Antonio Viejo: Aparentemente muy colaborador. Ya se estableció el tuteo y la buena relación. Pendiente de apoyo tema Joy [Adrián de la Joya], a quien le pide después que "acuda a tomar café con el decano". Desde el 12 de noviembre de 2014 es Armengol el que se encarga de "hablar y tantear" al decano y "a la jueza".

Sin embargo, otras anotaciones ponen de manifiesto que Armengol no traslada a Viejo las gestiones que le exige Villarejo, pues considera que "se puede asustar". El comisario acaba perdiendo la paciencia pues considera que el exdecano siempre le da "largas. No le había dicho nada a Viejo. Queda en hacer gestiones y llamar. No lo hará", vaticina. Y por eso el comisario planea acudir de forma directa a Viejo: Esperar que llame Olivera porque Armengol no está haciendo nada".

En busca y captura

EL PERIÓDICO DE ESPAÑA no ha logrado conocer la versión de Antonio Viejo y José Luis González Armengol. Pero en una información de eldiario.es González Armengol aludió a que cuando se producen estas anotaciones él ya no era decano de los juzgados de Madrid. Por su parte, Viejo reconoció haber estado con Villarejo en "dos o tres ocasiones".

Lo que sí ha podido confirmar este periódico es que la Justicia no exoneró a Abdul Rahman El Assir, que acabó en el banquillo de los acusados. La vista se suspendió en varias ocasiones porque había un problema con la consignación de la cantidad acordada. En concreto el 4 de octubre, el 6 de noviembre y el 5 de diciembre de 2019. También el 5 de febrero y el 5 de marzo de 2020. El 6 de marzo de 2020 se le puso en busca, captura internacional y rebeldía. Sin embargo, Juan Carlos I ha retomado sus relaciones con el excuñado de Adrián de la Joya, uno de los principales imputados del caso Tándem.