Junts per Catalunya empleó su turno de pregunta, en al sesión de control al president, en el Parlament para pedirle a Pere Aragonès "generosidad y responsabilidad" en la gestión de la pugna entre republicanos y convergentes. Una demanda, la de Albert Batet, extraña, no tanto por el qué, sino por el cuándo. La petición llega a menos de 24 horas de que se abra el plazo de voto a las bases posconvergentes de la consulta donde se pregunta si su fuerza debe o no abandonar el Ejecutivo.

"Le pedimos generosidad y responsabilidad, en tanto que responsable público y en la misma medida que nos las autoexigimos", señaló Batet. En su respuesta, Aragonès mostró respeto por los mecanismos de toma de decisiones de Junts (antes, con Alejandro Fernández, incluso los había defendido) e hizo votos por la continuidad de Junts en el Executiu. "Hemos trabajado bien en este años y medio", razonó.

Eso sí, Aragonès advirtió de que, si de la consulta se concluye que Junts sigue en el Govern, habrá que revisar muchos aspectos para evitar que "en 15 días se vuelva a estar igual". Reclamó, si el sentido del voto apunta a mantenerse en el gabinete, una mayor implicación, no de los consellers, de los que no tiene queja, "sino del conjunto del partido".

El president trató de quitarle importancia al contenido de las demandas de Junts. "Nos piden coordinación en el Congreso. Dela por hecho...siempre que no se pretenda que ningún grupo parlamentario imponga a otro sus tesis", aseveró.

ERC, en su turno, sí apretó un poco más las clavijas a Junts al solicitar al president que actúe con "celeridad", por cuanto la crisis económica debida a la inflación desbocada, no permite despistes.

Salvador Illa orilló todo ofrecimiento de colaboración, para el caso en que Junts optara por al ruptura, y presentó de nuevo su candidatura al premio de diputado combativo. Reclamó al president, de nuevo y van casi una decena, que convoque la mesa de partidos catalanes. Aragonès le replicó que para ello se precisa conocer que "propuesta" tiene el PSC para la resolución del conflicto político entre Cataluña y el Estado.