J. L. A.

El elemento más destacado de los nuevos accesos al centro de talasoterapia que se construye junto a playa de Poniente, en Fomento, será una marquesina de vidrio translúcido, con soportes atirantados de acero galvanizado y una longitud de 180 metros. Con esta instalación, los arquitectos Esther Roldán y Víctor Longo, autores del proyecto, plantean una intervención que calificaron de «ligera» y redactaron como «invitación al balneario, no sólo de protección frente al mal tiempo».

Roldán y Longo, ganadores de dos premios «Asturias» de Arquitectura (el primero de los galardones lo recibieron por el centro de servicios múltiples de la Autoridad Portuaria, en El Musel), explicaron ayer que su propuesta para la reordenación del dique curvo de Fomento mantiene un paseo con dos alturas y garantiza el acceso rodado y peatonal hasta la puerta de entrada del centro de talasoterapia.

«No queríamos cargar mucho la zona», manifestaron los arquitectos, que presentaron su proyecto acompañados por el jefe de Conservación y Mantenimiento de la Autoridad Portuaria, Roberto Díaz Rato. Éste justificó la reordenación del dique curvo de Fomento por la necesidad de «embellecer la zona» con el nuevo uso terciario de un espacio que el Puerto cedió al Ayuntamiento para el centro de talasoterapia.

El proyecto ha sido adjudicado a la empresa Aldesa Construcciones, con un plazo de ejecución de tres meses. Los trabajos costarán 600.000 euros (más IVA) y empezarán, previsiblemente, en los próximos días, según señaló Díaz Rato. Éste indicó que se optó, finalmente, por la solución del acceso terrestre, a través del dique, por el rechazo que causó entre los usuarios del puerto deportivo la propuesta de una pasarela móvil.

Esta nueva conexión entre el balneario, que aún no tiene una fecha concreta para su apertura, y el paseo marítimo de Fomento permite la llegada de autobuses hasta el centro de talasoterapia, con espacio para maniobrar y varias plazas de taxis y vehículos para discapacitados. El acceso, abierto al uso peatonal, incorpora un carril bici, señalizado tan sólo por unas líneas pintadas en el pavimento. «No queremos generar barreras físicas y proponemos una coexistencia de usos», afirmó Esther Roldán.

La marquesina atirantada sobre el dique incorpora, además, una iluminación corrida ornamental, con tres tipos de luces y una línea continua de fluorescentes. En la base de la instalación se colocarán protectores que bañarán con una luz azul los mástiles de acero galvanizado.

El acceso al balneario se hará desde la actual entrada del dique curvo de Fomento, en la zona del paseo donde está instalada una zona de juegos que el proyecto a ejecutar conserva, aunque con algunas modificaciones. Los arquitectos tampoco tienen previsto eliminar el arbolado existente.

La reordenación del dique mantiene dos paseos a distinta cota. Según explicaron los arquitectos, el tramo superior no se tocará y en la zona exenta a los accesos se recuperará la barandilla e iluminación que se utilizan en los espacios del muelle deportivo.