R. VALLE

Paz Fernández Felgueroso y Jesús Montes Estrada -máximos líderes de los grupos municipales del PSOE e IU que conforman el gobierno local gijonés- dejaron ayer en manos del socialista Santiago Martínez Argüelles la responsabilidad de poner los puntos sobre las íes a la exigencia del alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, de que se incluya en la reforma del Estatuto de Autonomía el reconocimiento explicito a que Oviedo es la capital de Asturias y como tal debe ser la sede de las instituciones oficiales y tener una compensación económica por ello. El deseo de Gabino de Lorenzo se transformó este lunes en una moción del Ayuntamiento de Oviedo.

«La Junta de Gobierno no ha podido sustraerse a este debate sobre la reforma del estatuto y la capitalidad», adelantó un irónico Martínez que evitó en todo momento hacer referencia expresa a Gabino de Lorenzo en sus reflexiones. No hacía falta, a buen entendedor pocas palabras bastan. «No puede ser que alguien plantee este problema irreal como cortina de humo para tapar derrotas y fracasos electorales recientes», indicó Martínez en referencia a la fallida aventura de De Lorenzo al frente de la candidatura del PP al Congreso de los Diputados en las pasadas elecciones generales. Santiago Martínez, que ejercía como portavoz de la Junta de Gobierno al realizar estas apreciaciones, criticó que «se monten sainetes con el asunto de la capitalidad» e hizo chistes con «lo que pasa cuando alguien se quita la boina».

Más allá de la pulla política desde el Ayuntamiento de Gijón se quisieron dejar claras ayer dos cosas: que la capitalidad de Oviedo no está en peligro y que Gijón no tolerará que ese privilegio tenga además una compensación económica. «La capital de Asturias es la que es y no está en cuestión; pero no es oportuno, ni prudente ni tolerable que se exijan compensaciones económicas. Desde Gijón se entiende que no puede llevar aparejado privilegio en el ámbito económico: ser capital ya es una ventaja», sentenció el concejal de Hacienda y Coordinación Administrativa.

El portavoz del gobierno local exigió, como ya hicieran en los últimos días otros líderes socialistas en los ámbitos local y autonómico, respeto para los grupos parlamentarios que están debatiendo en la Junta General del Principado la reforma del Estatuto de Autonomía. Martínez calificó de «inapropiado» que ayuntamientos que no tienen competencias en este debate se involucraran en el a través de «vetos, chantajes u otras fórmulas». Nuevamente las palabras del edil socialista hacían referencia al alcalde ovetense sin nombrarlo. En cuanto a la exigencia de mantener las sedes institucionales en Oviedo, el edil gijonés sentenció que: «El debate del siglo XXI trata sobre el acercamiento de los servicios a los ciudadanos, la cuestión nominativa es un debate del siglo XIX».

Santiago Martínez ha sido, por ahora, la última voz gijonesa que se ha dejado sentir en la polémica sobre la capitalidad de Asturias. La pasada semana hacia frente a Gabino de Lorenzo el secretario general del PSOE local, José Manuel Sariego, en calidad de alcalde en funciones de la ciudad, y Paz Fernández Felgueroso mantuvo abierto el debate con Gabino de Lorenzo el pasado verano.