Siete conductores fueron detenidos durante el fin de semana en los controles de alcoholemia que realizan los agentes de la Policía Local. La acompañante de un conductor al que se le realizaba el test de alcoholemia también fue detenida por intentar agredir a los policías con una navaja.
Los hechos tuvieron lugar en la madrugada de ayer, alrededor de las cuatro menos veinte. Los agentes de la Policía Local habían detenido a un conductor para realizarle el test de alcoholemia sin esperar la reacción violenta de su acompañante. F. J. G. F., de 33 años circulaba por la calle Claudio Alvargonzález. Su test de alcoholemia arrojó un resultado de 0,79 miligramos de alcohol por litro de aire expirado, por lo que fue detenido. Su acompañante, A. P. H., de 42 años, también fue detenida ya que mientras el conductor realizaba el test se bajó del coche y amenazó a los policías navaja en mano asegurando que les estaban «molestando».
En la medianoche del sábado fue arrestado M. H., de 41 años de edad. El hombre circulaba de manera incorrecta por la calle Ramón y Cajal y se negó a realizar el test de alcoholemia, por lo que se le imputan dos delitos.
El Ayuntamiento anuncia esta semana la fecha definitiva para la puesta en marcha de los radares fijos que ya han sido colocados en la ciudad. Son siete los puntos conflictivos en los que, mediante tres dispositivos de radar, se controlará la velocidad de los conductores gijoneses. En la fotografía, el radar situado en La Guía, avenida de Justo del Castillo.
