La protesta se ha realizado esta mañana en la rotonda de Maximino González, frente al astillero, al finalizar una asamblea en la que el comité de empresa ha informado a los trabajadores de la determinación de la dirección de la compañía.

Naval Gijón ha resuelto no contratar nueva carga de trabajo y entrar en cese de actividad previsiblemente en noviembre al finalizar el buque que está construyendo.

Los representantes sindicales han informado en la asamblea que la empresa se comprometió a presentar en un mes el plan de cierre que está vinculado a la incorporación de cuarenta y un trabajadores al astillero Juliana y la prejubilación de otros cincuenta del resto de la plantilla.

CCOO y UGT creen insuficiente la propuesta porque Juliana ha anunciado que no respetará las categorías y la antigüedad de los trabajadores que sean traspasados.

El sindicato CSI exige la contratación de nueva carga de trabajo y rechaza el plan de cierre de la compañía.