La parroquia de Fátima vivió ayer una jornada especial con la celebración de una misa solemne en honor de su patrona, y una espicha en las que participaron alrededor de un millar de fieles. Los actos, organizados por el párroco José María Bardales con motivo de la festividad de Fátima, que tuvo lugar el pasado martes, se desarrollaron a primera hora de la tarde y estuvieron protagonizados por la actuación del Coro «Los Collacios», de La Calzada, y el Coro «Aires del Mar», que interpretó varios temas religiosos durante la liturgia.

Después del acto religioso los asistentes acudieron a la zona ajardinada que está situada junto al templo y allí participaron en la espicha. «Cada uno traía comida de casa y la compartía con todo el mundo», afirmó Bardales. La sidra corría a cuenta de la parroquia. «Es un acto que repetimos todos los años y que cuenta con mucha aceptación por parte de la gente», añadió el párroco, antes de recordar que «milagro o no de la Virgen, lo cierto es que dejó de llover justo cuando empezamos a comer». Con los de ayer la parroquia de Fátima da por cerrados los actos de celebración en honor de su patrona.