Román GARCÍA

Llegaron al banco para sacar dinero en efectivo con el que pasar el fin de semana y se encontraron con que sus dos cuentas estaban a cero. Acababan de desaparecer «los ahorros de toda la vida». Es el caso de un matrimonio gijonés de más de 50 años de edad que el pasado 2 de mayo fue víctima de una estafa bancaria realizada a través de internet por una ciudadana rusa, Elena S., ya detenida, de 31 años y con otros casos similares.

El matrimonio, que asegura que no ha dado a nadie sus claves de acceso a las cuentas, preguntó en el banco por su dinero y los responsables de la oficina principal del BBVA situado en la plaza del Carmen les aseguraron que en sus archivos figuraba una orden de los propietarios de la cuenta ordenando la transferencia de todo su dinero a otra cuenta en Murcia. Acababan de ser víctimas de una estafa. No habían ordenado el traslado del dinero.

Los afectados, sorprendidos, decidieron poner el caso en manos de sus abogados, que se personaron en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Gijón, donde hablaron con los especialistas en delitos económicos. Una vez aclaradas las posibles causas, las víctimas interpusieron una denuncia contra el banco, al que consideran responsable de lo que pase con sus ahorros, y otra contra la persona que se los había llevado.

Tras interponer la denuncia, el banco se hizo cargo de la situación y devolvió a los clientes el dinero que había sido sustraído de sus cuentas. Según ellos mismos declararon, el dinero que habían conseguido ahorrar «durante toda la vida». Una cantidad que, aunque no quisieron precisar de manera exacta, era «elevada». Ahora, con el caso en manos de sus abogados, han decidido seguir el proceso judicial en busca de responsabilidades penales por estafa.

Fuentes policiales de la Región de Murcia aseguran que la mujer que recibió la transferencia, Elena S., de nacionalidad rusa y 31 años, tenía su cuenta domiciliada en la calle Mayor del Espinardo de la capital murciana, en la misma entidad que las víctimas de su presunta estafa. Desde la Dirección de la Policía se ordenó la detención de esta joven, que ya tenía otros casos penales pendientes de similares características. Elena S., según la Policía, que se dedicaba a acceder a cuentas de banco a través de internet para quedarse con el dinero de los clientes, según aseguraron fuentes policiales a las víctimas.

Otras fuentes policiales que afrontan este caso en Murcia aseguran que, en el momento de la detención, la joven rusa manifestó no saber qué delitos se le imputaban.

En Gijón se sigue la instrucción del caso hasta que se aclaren las responsabilidades que se pueden asignar al banco. De momento, el matrimonio gijonés respira tranquilo, ya que su historia se ha quedado en un mero susto. Sus ahorros están de nuevo en las dos cuentas en las que siempre los han guardado.

Afectados

Un matrimonio gijonés que perdió «todos los ahorros de la vida».

Delincuente

Una rusa de 31 años, detenida en Murcia y acusada de otras estafas, todas ellas cometidas a través de internet. Desviaba dinero a su cuenta en la pedanía de Espinardo.