A. RUBIERA

«Estoy en Gijón porque no quería calor». Michal Chudacik explica así su incorporación al Hospital de Cabueñes como residente de la especialidad de medicina familiar y comunitaria. De todas las variables posibles para elegir destino y especialidad, la suya era la que más llamó la atención de algunos de los responsables de la Administración sanitaria asturiana que ayer dieron la bienvenida a Chudacik y a otros 35 compañeros que ya forman parte del personal -en formación, eso sí- del área V.

Natural de Eslovaquia, sin familia en Asturias, ni siquiera en España, Michal Chudacik decidió que quería trabajar en España después de hacer el servicio voluntario europeo (un programa que favorece la participación de jóvenes de toda Europa en actividades de voluntariado) en un hospital psiquiátrico de Palencia. En el mismo sitio en el que se le despertó su vocación por la salud mental también se afianzó su determinación de huir de las altas temperaturas que en el verano se alcanzaban en Palencia. Volvió a su país, terminó la carrera de Medicina y retornó a España.

Trabajó como auxiliar un año, «mientras me homologaban el título y se arreglaba el papeleo», explica, y preparó por libre la prueba mir, que aprobó. Pero cuando le tocó elegir especialidad y destino «no pude hacer salud mental, y los lugares que quedaban eran Extremadura, Andalucía, Castilla-La Mancha... demasiado calor», refiere. Así que decidió sobre la marcha: médico de familia y el Hospital de Cabueñes. Michal Chudacik es uno de los refuerzos extranjeros que ha logrado el centro sanitario gijonés.

El joven alemán Klaus Hocker será, a su vez, la nota europea en la uvi; una joven rumana se formará en el servicio de oftalmología y una argentina hará medicina de familia. «Cada vez recibimos más profesionales extranjeros, aunque hasta ahora la mayoría nos llegaban de Latinoamérica. Saben que ahora es un buen momento para trabajar», decía Luis Hevia, gerente de atención primaria del área V.

A ese buen momento también se refirieron Montserrat Farrás y Felicidad San Feliz, directora médica y de enfermería de Cabueñes: «Sois nuestro futuro; la gente que nos dará el relevo y llegáis en el mejor momento», les dijeron. En el acto participó también la directora de la Escuela de Enfermería (además anfitriona del encuentro), Cristina Fernández, y el doctor Joaquín Morís, responsable de la formación en el hospital gijonés. Morís se congratuló de que este año se incorpore como mir en Cabueñes un segundo residente a la especialidad de medicina de familia, y anunció que para el próximo año Cabueñes ofertará también residencia en dos nuevas especialidades: cirugía vascular y anestesia. «Se va completando el campo formativo y eso siempre es beneficioso para el hospital y para los propios residentes», afirmó Morís. Y para los pacientes.

- 1 residente de oftalmología

- 1 residente de análisis clínicos

- 1 residente anatomía patológica

- 1 residente de cirugía general y aparato digestivo

- 1 residente de cirugía ortopédica y traumatología

- 1 residente de hematología y hemoterapia

- 1 residente de farmacia

- 1 residente de medicina intensiva

- 2 residentes de medicina interna

- 2 residentes de obstetricia y ginecología

- 2 residentes de pediatría

- 2 residentes de radiodiagnóstico

- 1 residente de urología

- 1 residente de medicina familiar y comunitaria

- 2 residentes de Salud Mental.

- 3 enfermeras residentes de obstetricia

- 3 enfermeras residentes en salud mental