A. R.

El psiquiatra leonés Luis Velilla habló ayer en el pabellón de congresos de la Feria sobre la salud mental hoy. Para el psiquiatra «el "boom" de la enfermedad mental actualmente se debe a que hay mucho estado de disconformidad, de frustración, que genera trastornos afectivos, ansiedad, depresión... pero eso no es gente enferma; es gente sana, pero infeliz, a la que habría que educar de otra forma». Para Velilla la verdadera patología de salud mental «no está aumentando». La enfermedad mental grave y prolongada, principalmente psicosis y esquizofrenia, sigue estando «en un número constante, en torno al 1 por ciento de la población. Y de esos enfermos, un tercio acaba siendo totalmente dependiente y con grado de deterioro grande», apuntó el experto. Es ese grupo, cree, el que está falto de recursos sociales .

«Se ha hecho un esfuerzo muy importante en la atención a la salud mental, con la integración del enfermo en el sistema sanitario general, pero quedan algunas lagunas como en la atención social. Porque lo que a muchos les falta es un lugar donde vivir o donde estar bien acogidos y cuidados. Yo creo que en eso que la iniciativa privada tiene mucho que decir, entre otras cosas porque es más rápida», explicó el psiquiatra que participaba, precisamente, en una jornada sobre la salud mental invitado por el grupo Espinareu, que en septiembre iniciará la construcción de la primera residencia privada para enfermos de salud mental, con 50 plazas y una inversión de 2.5 millones, en Hevia (Siero). El grupo inversor gijonés se plantea abrir de 250 a 300 camas para este colectivo en un plazo de cuatro años, tanto en León (donde ya tienen dos recursos) como en Asturias.