M. CASTRO

Los empresarios asturianos han puesto sus ojos en Panamá tras la última visita a Gijón del ministro de Obras Públicas del país centroamericano, Federico José Suárez, hijo de un gijonés emigrado hace 55 años al país del Canal. El ministro pasó por varias comunidades autónomas animando a las empresas españolas a que participen en los concursos que se van a abrir en su país para mejorar las comunicaciones por ferrocarril y carretera. Su mensaje caló en Asturias, donde un grupo de empresarios está organizando un viaje de negocios a Panamá.

Federico José Suárez llegó a Gijón gracias a las gestiones del Círculo de Empresarios, Directivos y Profesionales de Asturias (CEDYPA), a cuyo presidente, José Blásquiz, conoce personalmente desde hace años. La empresa de Blásquiz, Atox Sistemas de Almacenaje, exporta estanterías metálicas a Panamá desde hace quince años. El ministro, antes de tomar posesión de su cargo, dirigía la empresa de su familia, Constructora Suárez, una de las grandes del país.

Además de estos empresarios que se desplazarán próximamente a Panamá, Feve ya ha manifestado su interés por presentar sendas ofertas para la construcción de una línea de tranvía en la ciudad de Panamá y para el tendido de una línea férrea entre la capital y una provincia. La revisión y ordenación de las concesiones de líneas de autobuses es otra de las ideas del nuevo Gobierno panameño. Durante su visita a España, Federico José Suárez también se interesó por la construcción de túneles.

Otras empresas ligadas a Asturias, como es el caso del grupo naviero Suardíaz, están interesadas en participar en el negocio en torno a la ampliación del Canal de Panamá, una obra que ha sido adjudicada a la constructora española Sacyr-Vallehermoso. Suardíaz intenta conseguir que Sacyr le encargue los transportes de materiales y maquinaria para la gran obra del Canal, que se suministrarán desde España y desde otros países latinoamericanos, fundamentalmente. Aunque ese contrato dependerá directamente de Sacyr, parece lógico pensar que el Gobierno panameño tendrá capacidad de influencia sobre el mismo, dada la importancia de la cadena logística para que avancen adecuadamente las obras del Canal, una infraestructura que supone la principal fuente de riqueza del país centroamericano.