J. L. A.

La Coordinadora Ecoloxista d'Asturies pidió ayer a la Autoridad Portuaria de Gijón explicaciones por no advertir del incendio de una pila de carbón en las terminal de minerales de El Musel, «contigua a las instalaciones de la regasificadora».

Para los ecologistas, «resulta evidente que El Musel es ya un puerto peligroso». «No podemos aceptar que se ponga una regasificadora al lado de otras instalaciones que, como hemos comprobado, se autoincendian, con los riegos que supone para los vecinos», afirmaron. El carbón arde por combustión espontánea en determinadas circunstancias. Recordaron que la regasificadora, adjudicada por Industria a Enagás y en proceso de obras, está a menos de mil metros de los depósitos de gas de la Campa Torres y de tres terminales petrolíferas, las de CLH, AGIG y Petróleos Asturianos. En un radio próximo de unos dos kilómetros viven unas 70.000 personas en los barrios del oeste gijonés.

La plataforma contra la regasificadora denunció, por su parte, que el incendio de carbón muestra que la planta, en proceso de obras, es incompatible con algunas de las actividades de El Musel: «Ese incendio por combustión espontánea pone de manifiesto un delicado problema en cuanto a seguridad».

La terminal de graneles sólidos, que está en el muelle Marcelino León, se trasladará al nuevo muelle norte de la ampliación de El Musel. Para la citada plataforma, ese traslado supone que «la cinta transportadora de mineral pasará por detrás de la propia regasificadora, y alrededor de ésta se desarrollarán actividades que nada tienen que ver con la empresa Enagás». Es decir: «No se puede cumplir la zona de exclusión en la cual sólo Enagás gestiona ese terreno».