C. J. / R. V.
«No considero en absoluto la posibilidad de dimisiones». Así de tajante se mostró la regidora socialista, Paz Fernández Felgueroso, ante la propuesta de la portavoz del PP de Gijón, Pilar Fernández Pardo, quien el pasado viernes pidió dimisiones y ceses por la aprobación, en el Consejo de Cooperación, de una declaración en la que se decía que en España se perseguía a los inmigrantes, se producían torturas y se amenazaban las pensiones. Pardo llegó a amenazar incluso con dar a conocer este asunto en el Congreso, para obligar a intervenir a José Luis Rodríguez Zapatero. «Eso de que la resolución vaya a Madrid me parece algo así como: "Voy a acusarte a papá", dicho así, en términos coloquiales», remarcó la Alcaldesa.
Tampoco se plantea Jesús Montes Estrada, «Churruca», seguir los consejos de la líder popular. Más bien al contrario: el líder de IU, que asume toda la responsabilidad sobre la polémica declaración, se enfrentaba a Fernández Pardo asegurando: «A nosotros nos ponen y nos quitan los votos de los gijoneses. Sus balas de fogueo no van a conseguir que se deje de hablar de los problemas del PP y de la vuelta de Cascos. Hay un dicho popular que dice que a todo gochín le llega su samartín, y a ella, a fuerza de cortar cabezas, le llegará casi con seguridad».
Por otra parte, Nuevas Generaciones del PP exigió ayer al presidente del Conseyu de la Mocedá, el socialista Jordán Suárez, que firmó la polémica declaración del Consejo Municipal de Cooperación Internacional, que convoque con carácter inmediato una reunión del Comité Ejecutivo, y una posterior asamblea «para que dé a las asociaciones» que conforman el citado consejo «cuenta de su proceder», al tiempo que exigió la dimisión de sus cargos.
