Las obras del Colegio Jovellanos han cogido, después de muchos tropiezos, el ritmo que toda la comunidad escolar venía esperando. Tanto es así que la plantilla del colegio tiene la orden de que a fecha de 25 de junio deberán desalojar el actual edificio, para que los operarios puedan proceder al vaciado del inmueble. Seguidamente se harán las obras necesarias para comunicar mediante un paso interior ese bloque con el nuevo que se está construyendo en el solar anexo, y que será el que toda la comunidad escolar ocupará el próximo curso. Un curso en el que seguirán los trabajos de ampliación, centrados en el histórico inmueble del «grupo escolar Jovellanos», cuya fachada se mantendrá.