R. GARCÍA

La noche se les prolongó demasiado. Media docena de jóvenes fueron ayer expulsados por la Policía de una tienda de ropa situada en la calle Jovellanos en la que se habían introducido «para armar jaleo», según uno de los responsables del establecimiento. Los acusados se encontraban en estado ebrio.

Los hechos tuvieron lugar alrededor de las doce del mediodía. Los jóvenes se acercaron a la tienda y comenzaron a sacar fotografías a las dependientas. El responsable del establecimiento les pidió entonces, sin éxito, que abandonaran el negocio. Los aludidos comenzaron a proferir insultos contra todos los que se encontraban en el interior del local. Los dependientes decidieron entonces dar aviso a la Policía y hasta el lugar de los hechos se desplazaron varias patrullas de agentes. Los funcionarios expulsaron a los alborotadores, que se trasladaron hasta una cafetería cercana.

La actuación en esta tienda del centro se encuadra dentro del dispositivo especial de fin de semana que llevan a cabo de viernes a domingo los cuerpos policiales de la ciudad. Dentro de este plan especial también cabe destacar una de las actuaciones realizadas en la noche del pasado viernes por los agentes. Varias patrullas de funcionarios tuvieron que intervenir en una pelea que se había producido alrededor de las tres de la madrugada entre el portero de un bar de Fomento y dos de los clientes del establecimiento, por causas que se desconocen por el momento.

Los agentes trasladaron a los dos jóvenes a un centro sanitario en donde fueron curados de las heridas que presentaban y procedieron a la identificación de los jóvenes que se encontraban en el lugar. En principio, y según fuentes cercanas a la investigación del caso, no se han producido denuncias por lo que no fue necesario llevar a cabo arresto alguno.