J. M. CEINOS

Los vecinos de la colonia de chalés de El Pisón (Somió) no dan por perdida la batalla judicial para que se cierre la planta de pretratamiento de aguas residuales de la cuenca Este de Gijón, conocida popularmente como La Plantona, y están dispuestos «a llegar al Tribunal Europeo de Derechos Humanos si hace falta», aseguró ayer Marcelino Abraira Piñeiro, el letrado que defiende a los vecinos en su ya largo conflicto con las administraciones públicas.

Este letrado entiende que la sentencia de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) del pasado 30 de abril, en la que se desestima la petición de los vecinos de la colonia de El Pisón para que se clausure La Plantona, no cierra la vía judicial, por lo que será recurrida. En principio, «presentaré un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional y en el caso de que no sea admitido acudiremos al Tribunal Europeo de Derechos Humanos», señaló el letrado.

Marcelino Abraira sostiene que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Asturias lo que hace es «declarar que es imposible cumplir la sentencia firme de clausura de La Plantona por el cambio legal introducido por el Principado en 2007, pero en absoluto declara que La Plantona sea legal».

De hecho, los vecinos de El Pisón están a la espera de que se falle un recurso que se tramita en el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Gijón contra la tercera legalización de La Plantona, que se hizo mediante una licencia municipal de diciembre de 2008. «Por tanto, será en esa sentencia del recurso contra la tercera legalización donde se dirá si a pesar de la nueva normativa del Principado La Plantona es legal o no», explicó Marcelino Abraira.

Los vecinos de El Pisón ganaron dos sentencias, una del Tribunal Supremo y otra del Tribunal Superior de Justicia de Asturias, en las que se dicta el cierre de la planta de pretratamiento de aguas residuales. Los vecinos pidieron la ejecución de la sentencia, que es lo que los tribunales han rechazado, alegando que La Plantona tiene licencia municipal después de que el Gobierno del Principado, en la ley de acompañamiento de los Presupuestos del año 2007, eliminara el requisito de que una instalación de las características de La Plantona debe situarse, como mínimo, a dos mil metros de las viviendas.

Marcelino Abraira sostiene que en un Estado de Derecho «las sentencias deben ejecutarse, pero, claro, aunque ganes el pleito, la Administración te cambia la ley, y seguramente, aunque ganemos la tercera legalización, harán otra con una normativa distinta, y nosotros a seguir recurriendo».

En este sentido, el letrado explicó que «si hace falta recurriremos al Tribunal Europeo de Derechos Humanos para que anulen la reforma del Principado hecha "ad hoc"» por la que se elimina la obligatoriedad de los dos mil metros.

Por otra parte, la colonia de El Pisón también tiene presentados dos recursos contra el proyecto de construir en aquella zona de Somió la depuradora de aguas residuales de la cuenca Este, que incluye una nueva planta de pretratamiento subterránea en sustitución de La Plantona. Los recursos han sido presentados ante el Tribunal Superior de Justicia de Asturias y en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

Marcelino Abraira recordó que «dos peritos, uno nuestro y otro judicial, coincidieron en señalar que El Pisón es el peor lugar para construir la depuradora de las cuatro alternativas que se habían estudiado (las otras tres, respectivamente, en El Rinconín, Peñarrubia y La Cagonera).