A. RUBIERA

«Asturias debería tener tres salas de hemodinámica para atender las necesidades cardiovasculares de la población regional, pero sólo tiene dos, ambas en el HUCA. No lo digo yo, sino la Sociedad Española de Cardiología. Es necesario y prioritario que se incorpore una más y, por eso, la sala que le falta a Cabueñes no es una cualquiera, sino la tercera que se le debe a Asturias. El gasto en esta partida está más que justificado y es prioritario». Carlos Galcerán, diputado regional del PP, se sumó ayer, junto a sus compañeros populares gijoneses, a las denuncias vecinales surgidas por la paralización en el equipamiento del nuevo gran área del corazón del Hospital de Cabueñes. Un servicio en torno al cual se justificó y articuló (sobre todo basado en la incorporación de una sección de hemodinámica) la ampliación del hospital llevada a cabo en los dos últimos años y que concluyó el pasado mes de marzo.

«Reclamamos una unidad que se viene presentando en la memoria de gestión del Ayuntamiento desde el año 2005, repetidamente, y que incluso formó parte del compromiso electoral de Paz Fernández Felgueroso en 2008. El corazón en este área sanitaria no puede esperar. La enfermedad cardiovascular es la primer causa de mortalidad en España y si Cabueñes no ha incorporado la unidad de hemodinámica prometida es sólo por una mala gestión y falta total de compromiso de las autoridades regionales y municipales», recriminó por su parte Pilar Fernández Pardo.

Fernández Pardo no tuvo más que recordar todo lo que desde el año 2005 se lleva prometiendo y asociando al plan del corazón en Gijón. Así, indicó que «no sólo es una unidad para los pacientes del área V, también para Arriondas y Langreo», y lamentó que se pueda llegar a convertir en una segunda causa de conflicto sanitario-ciudadano en Gijón, como ocurrió con la radioterapia. Para la líder de la oposición gijonesa, que hoy llevará este debate al Pleno municipal, «no se puede prometer lo que no se va a cumplir; debemos instar a la Alcaldesa a que utilice su influencia, si es que le queda alguna en el Gobierno regional, para que se cumpla un proyecto tan largamente prometido a los ciudadanos».

Por su parte, Carlos Galcerán alertó que sólo en el 2008, en Asturias, se habían hecho más de 3.000 pruebas diagnósticas hemodinámicas, una cifra que en otras autonomías -y según las recomendaciones de la Sociedad Española de Cardiología- se vería traducida en tres unidades de hemodinámica.

«No podemos entender que cuando se hace un proyecto no se haga entero, con previsión de obra y de equipación tecnológica. Esto que está ocurriendo en Cabueñes es una gran anomalía, un engaño. Y, sobre todo, repercute en una atención muy necesaria», apuntó el diputado que adelantó, además, que el PP también ha dirigido una proposición no de ley a la Junta General del Principado para que se inste al Consejo de Gobierno a la puesta en marcha del área de hemodinámica en Cabueñes antes del 30 de septiembre. «Son seis meses de plazo, desde que acabó la obra de ampliación del hospital, un tope suficiente», comentó el diputado. Sobre los anuncios del consejero de Sanidad de que quizá haya ajustes debido al momento económico, Galcerán fue tajante: «en sanidad no se puede recortar nada, sólo se debe gestionar mejor».