R. G.

Una mujer de 54 años fue detenida en la madrugada del pasado jueves acusada de molestar a los clientes de un bar. El suceso tuvo lugar en un establecimiento de hostelería situado en la avenida Pablo Iglesias.

La acusada opuso gran resistencia a su detención llegando incluso a tirarse en la carretera delante del coche patrulla para impedir que los agentes continuaran su recorrido. Cuando los funcionarios trataron de levantarla la acusada comenzó a lanzar patadas y puñetazos a los policías con la intención de hacerles daño por lo que también se le imputa un delito de atentado.