M. CASTRO
Astilleros Armón desembolsará 8 millones de euros para hacerse con las instalaciones del antiguo Izar Gijón, tras haber alcanzado un principio de acuerdo con Pequeños y medianos Astilleros Sociedad de Reconversión (Pymar), el Principado y Factorías Vulcano para adquirir los activos del histórico astillero gijonés. Armón constituirá una empresa filial para comprar los activos, libres de toda carga, salvo la hipoteca que pesa sobre los terrenos a favor de Pymar y que supondrá para el grupo naviego el pago aplazado de otros 15 millones de euros.
La negociación, en sus últimos flecos, se cerrará la próxima semana, según señalaron ayer la alcaldesa de Gijón, Paz Fernández Felgueroso, y el consejero de industria del Principado, Graciano Torre. La semana que viene la oferta de Armón llegará a los administradores del concurso de acreedores de Factorías Juliana. Las diversas fuentes consultadas descartan que sufra cambios relevantes de aquí a entonces.
Aunque la operación suponga un coste inicial de ocho millones de euros para Armón, Factorías Juliana (actual propietaria de las instalaciones y filial del grupo gallego Factorías Vulcano) percibirá en total 16 millones de euros por la venta.
Esto es posible porque la operación está engrasada por la Administración autonómica, que aportará los ocho millones de euros adicionales para garantizar el reflotamiento de la construcción naval en la ciudad. El Principado no entregará ese dinero directamente a Factorías Juliana, en concurso de acreedores, debido a conveniencias legales. La ayuda pública se dará a Armón, para el relanzamiento del astillero de El Natahoyo. Esto es: Armón percibe ocho millones de euros del Principado y paga 16 millones a Factorías Juliana para hacerse con sus instalaciones, asumiendo como única carga una hipoteca de 15 millones de euros sobre los terrenos.
En el caso de que el juez de lo mercantil dé el visto bueno a la venta de los activos, los acreedores se repartirán los 16 millones de euros que ingresará Factorías Juliana en esta operación. El astillero gijonés cuenta con un pasivo de 61,53 millones de euros. La operación también implica que Factorías Vulcano asuma la construcción del sísmico 535, contratado por Factorías Juliana y que corre el riesgo de entrar en cancelación.
Respecto a los 15 millones de hipoteca que tendrá que asumir Armón, el grupo naviego y Pymar (que permanecerá como avalista de la misma), negociarán un alargamiento de los plazos de pago de la misma con el Banco Popular.
La compra de los activos en lugar de la empresa permitirá acelerar la vuelta a la actividad del astillero de El Natahoyo, al evitar tener que esperar a un levantamiento del concurso de acreedores de Factorías Juliana. En el caso de que cuaje la operación, las administraciones tienen interés en que el grupo Armón inicie su actividad en Gijón el próximo otoño. Lo podría hacer con dos barcos de apoyo a plataformas petrolíferas, que no están en vigor, o con otra carga de trabajo que transfiera desde alguno de sus astilleros.
