R. VALLE

A un año de las elecciones, las relaciones entre Izquierda Unida y sus coaligados del Bloque por Asturies (BA) y Los Verdes hacen aguas. La petición del único diputado regional del Bloque, Roberto Colunga -que fue asesor del concejal Jesús Montes Estrada en el área de Cultura Asturiana-, de pasarse al Grupo Mixto de la Junta General del Principado coincidía ayer con una importante escaramuza a nivel local entre IU y Los Verdes.

Eduardo Campomanes, en su calidad de portavoz federal de Los Verdes d'Asturies, remitía ayer un correo electrónico al responsable de organización de IU-Xixón, Guillermo Miranda, para mostrar la «insatisfacción» de su colectivo y exigir a los líderes municipales de IU -y socios del PSOE en el gobierno de Paz Fernández Felgueroso- que intensificaran su oposición a la incineradora de Serín y a la extracción de arena en San Lorenzo a causa de las obras de El Musel, que impulsaran la puesta en marcha de la recogida selectiva domiciliaria y votaran en contra de la aprobación inicial del Plan General de Ordenación y el catálogo urbanístico. Campomanes aseguraba utilizar el correo electrónico ante la imposibilidad de haber podido reunirse con Montes Estrada y su equipo.

Ese comentario y el hecho de que el escrito de Los Verdes se enviara también a los medios de comunicación sentaron en IU peor que los temas de fondo motivo de la discrepancia. «Aquí hay un grado muy alto de poca lealtad y un sentido de la oportunidad política que se pone muy en cuestión. Las cosas se hablan y después hay acuerdos o no. Para entrar en este despacho no hay que pedir audiencia», indicaba ayer Churruca desde su mesa de trabajo en el Ayuntamiento y con Guillermo Miranda a su lado. Esa misma tesis se recoge en la contestación del responsable de organización de IU a Campomanes, donde se acusa a Los Verdes de «facilitar bazas al PP, tradicional enemigo del PGO, no precisamente por combatir la especulación y la corrupción», y se les recuerda que «no comprendemos el sentido público del envío, salvo sumar a río revuelto. Una vez hecho público, nos dejáis escaso margen de maniobra».

Una maniobra que no pasa por votar contra el Plan General, que, en palabras de Montes Estrada, «profundiza en el desarrollo industrial de la ciudad, prima a las viviendas protegidas sobre las libres y respeta todos los aspectos medioambientales. Todos. Consolidando parajes de vegetación autóctona como la carbayera de Zarracina y otras». Esta última referencia tiene que ver con la denuncia sobre irregularidades en la ficha del catálogo de esta zona verde realizada por los vecinos de Cabueñes y apoyada por el PP y Los Verdes. En cuanto a la incineradora de Serín, Montes Estrada sólo quiso recordar a sus coaligados que el Ayuntamiento de Gijón no había concedido licencias para esa instalación en su territorio. El líder municipal tampoco defendió la ampliación portuaria por su carácter de motor económico.