J. L. A.

Después de casi dos décadas de intensa actividad (más de un millón de personas han visto sus montajes), la compañía madrileña «Yllana» ha ido depurando su propuesta hasta lograr un lenguaje propio que la convierte en una de las grandes referencias del humor gestual, según coincide en subrayar buena parte de la crítica. Mañana, jueves, llega al teatro Jovellanos (19.00 horas) con «Zoo», una hilarante aventura teatral sobre el viejo conflicto entre hombre y Naturaleza con la que obtuvo este año el premio «Max» al mejor espectáculo infantil.

«Zoo», que se estrenó en el verano de 2009, es el último montaje de «Yllana», compañía que gestiona, además, el conocido teatro Alfil, en la madrileña calle del Pez. El grupo, que ha producido un total de dieciséis espectáculos, viene dando pruebas de su talento desde el lejano 1991 y el recordado «¡Muu!». Desde entonces, su currículum se ha nutrido con títulos como «Los mejores sketches de los Monty Python», «La cantante calva» o «PaGAGnini».

El espectáculo que sube mañana al escenario del Jovellanos es apto para todos los públicos, no sólo para los niños. Unos exploradores chiflados se internan en lo más profundo de la selva para capturar, con destino al zoo, un animal en peligro de extinción. Pero los intrépidos cazadores verán cómo todo se les tuerce en una insensata y surrealista aventura a la que la crítica no ahorrado elogios. Bajo la dirección artística de Juan Francisco Ramos y David Ottone, los cuatro actores de «Zoo» (César Maroto, Juan Francisco Dorado, Susana Cortés y Rubén Hernández)) dan una nueva vuelta de tuerca a su «teatro del gesto»: la mímica al servicio de la inteligencia y el humor. A destacar, también, los efectos de sonido.

El prestigio de «Yllana», que organiza el Festival Internacional del Humor de Madrid y gestiona el Internacional Gag Institute, junto con el Instituto del Cine de Madrid, no es gratuito. Ha representado sus espectáculos en treinta países y ha sido premiada, por ejemplo, en el Festival de Teatro Europeo de Grenoble, en el Festival de las Artes de Singapur y en el Festival Juste Pour Rire de Montreal.